OBERÁ. La maniobra es macabra y merece el arresto de los responsables. Un hombre de 36 años utilizó como señuelo a la mujer para atraer a dos adolescentes a su domicilio, a los que intimidó a punta de cuchillo para obligarlos a practicarle sexo oral y después robarles.La historia comenzó cuando la mujer, de 24 años, envió mensajes de textos -vía celular- a los menores, de 15 y 17, induciéndolos a concurrir a su domicilio para mantener relaciones sexuales.Seducidos por la posibilidad de semejante aventura, ambos concurrieron a la cita, en el barrio Villa Sapucay de Oberá, al filo de la medianoche del viernes.Cuando arribaron al lugar, ella los invitó a ingresar en la vivienda, a sabiendas de lo que iba a suceder.Los adolescentes entraron y fueron sorprendidos por el marido o concubino de la anfitriona.El hombre, cuchillo en mano, amedrentó a los visitantes y obligó a practicarle una felattio.No conforme con semejante crueldad, sin apiadarse de la juventud y desprotección de dos menores que bien podrían ser sus hijos, les robó el celular a cada uno.Luego los dejó ir, quizás pensando que no los iban a denunciar, para evitar el escarnio público.Pero se equivocaron. Los adolescentes se trasladaron hasta la Policía y denunciaron lo sucedido.Poco después, ya en los primeros minutos de ayer, una patrulla del Comando Radioeléctrico, dependiente de la Unidad Regional II, procedió a la detención de la pareja degenerada.Fueron alojados en la comisaría seccional Segunda, a disposición de la jueza de Instrucción 1 de Oberá, Alba Kunzmann de Gauchat.Obviamente, por cuestiones de índole legal y de integridad psicofísica de las víctimas, se reservan sus identidades. Una víctima con retraso madurativo en San VicenteLa Policía sanvicentina investiga por estas horas una denuncia por abuso sexual en que la víctima es una mujer de 28 años, que padece retraso madurativo y cursa un embarazo de seis meses de gestación.En la Unidad Regional VIII, con asiento en San Vicente, tomaron conocimiento del hecho a través de un llamado telefónico efectuado desde el hospital local.La denuncia hablaba del ingreso a ese nosocomio de una mujer de 28 años, con las mencionadas características, que habría sido víctima de una violación.Los uniformados iniciaron de inmediato la investigación y se entrevistaron con el padre de la mujer.Este hombre contó que el miércoles, a eso de las 21.30, su hija se estaba bañando cuando irrumpió en la vivienda un muchacho de 23 años. No trascendió si el agresor tiene algún tipo de relación con la muchacha, pero lo cierto es que ella lo identificó como responsable del ataque.Al momento del hecho, no había nadie más que la víctima en el domicilio. Sus padres habían salido por un momento.Cuando regresaba la madre, el agresor sexual desistió de su acción, subió a la moto en que llegó y desapareció sin dejar rastros.Allí la supuesta víctima fue llevada al nosocomio, donde informaron del caso a la Policía.Tras la correspondiente denuncia, los investigadores apresaron al sospechoso. El procedimiento se llevó a cabo el viernes, aunque no trascendió la hora. Intervino personal de la Comisaría de la Mujer y de la división Investigaciones, concluyó el portavoz de la fuerza de seguridad.
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