SAN VICENTE. La Policía montó un amplio operativo de control y prevención en este municipio y zonas de influencia, que se prolongó durante seis horas y culminó pasadas las 2 de ayer. Reflejo de la importancia de este tipo de tareas, terminaron demoradas quince personas adultas, algunas de ellas con armas blancas, y once menores fueron retirados de las calles y entregados a sus padres.El trabajo policial, que se inició a las 20 del viernes, permitió además la captura de un joven que era buscado por su vinculación con un homicidio ocurrido en la zona rural de San Vicente (ver nota principal) .El operativo estuvo encabezado por el segundo jefe de la Unidad Regional VIII, comisario mayor Avelino Lorenzo, secundado por las dependientes comisarías Primera y Segunda, división Investigaciones, Toxicomanía y Comando Radioeléctrico.El mismo se centró en las jurisdicciones de los barrios San Ramón y Progreso.Los uniformados no sólo efectuaron demoras en averiguación de antecedentes, delitos y por infracción del Código de Faltas.También controlaron las documentaciones de los automóviles y motos que circulaban por la zona.Así detectaron que tres motos presentaban irregularidades e incumplimientos con las disposiciones legales que rigen el tránsito.La captura de un fugitivo y la demora de jóvenes con armas blancas dejan en claro la importancia de este tipo de labores en la lucha contra el delito y otros flagelos que asolan a la sociedad.En algunos casos se dio intervención al Juzgado de Instrucción 3 de San Vicente, a cargo del magistrado Demetrio Antonio Cuenca.Durante el lapso en que duró el operativo, entre las 20 del jueves y las 2 de ayer, una treintena de hombres patrullaron la ciudad.Desde la Unidad Regional VIII se informó que se continuará con esta modalidad de prevención, incluso en forma sorpresiva, concluyó el portavoz de la fuerza de seguridad provincial.
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