Desde que era menor de edad y valiéndose de la ausencia de la madre de su sobrina, la tía comenzó a obligarla a que tuviera relaciones sexuales a cambio de dinero y mercaderías. Una denuncia de la misma víctima motivó la detención de la instigadora y beneficiaria de la prostitución. Fue indagada por el juez y acusada por los delitos que cometió contra la joven.
La sospechosa tiene 27 años y fue trasladada al Juzgado de Instrucción 1 que por subrogancia se encuentra a cargo del magistrado Horacio Eriberto Alarcón.
Luego de leerle la acusación por la cual fue aprehendida, se negó a hablar por recomendación del defensor oficial y fue informada que era investigada por los delitos de “facilitación y promoción de la prostitución y corrupción de menores”. Continuará detenida a la espera del devenir procesal en su contra, entre ellos la declaración testimonial en sede judicial de su sobrina y de otros testigos.
En base a la tipificación penal impuesta, quedó aún más en evidencia que había comenzado a prostituir a su sobrina cuando ella era menor de edad. En este punto es necesario recordar que la víctima tiene actualmente 18 años.
Contó que desde el 2021 vivía con ella, luego de que su madre la abandonara junto a su hermana menor y quedaran a su cuidado.
Al poco tiempo la joven empezó a obligarla a que estuviera con hombres pero no en la casa donde vivía. Ella organizaba encuentros y la hacía ir o la pasaban a buscar para llegar a lugares donde era abusada.

Por si eso fuera poco, tenía que encargarse de cobrar y llevarle el dinero a su tía, tarifa que previamente la proxeneta había arreglado con el “cliente”. No solamente efectivo, sino que también aceptaba que le pagaran con mercaderías, las cuales su sobrina tenía que asegurarse que se las entregaran.
Si no aceptaba irse con ellos para ser abusada, tenía como opción irse a vivir a la calle, tal como la amenazaba constantemente de echarla si no aceptaba el “trato” a cambio de techo y comida.
La víctima contó además que su tía organizaba los encuentros vía Whatsapp, de manera que en su teléfono manejaba una lista de nombres que le enviaban mensajes solicitándole por los servicios.
Tras la denuncia y con orden judicial, la policía llegó al domicilio de la sospechosa y la detuvo. En el mismo operativo incautaron su celular, el cual iba a ser peritado en busca de material probatorio de los encuentros que pactaba.
Respecto a la joven, fue asistida por el equipo interdisciplinario para casos de abuso sexual.






