La Cooperativa Agropecuaria Sarandí Ltda. de El Soberbio cumplió 21 años de trayectoria en el rubro lácteo y continúa “remando con muchas ganas y esperanza” para que los productores locales tengan un ingreso estable cada mes, afirmó Cristina Silva en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones.
La cooperativa está integrada por entre 19 y 25 productores, todos socios que participan activamente en la producción, venta y gestión. Silva subrayó la importancia social de la entidad para la comunidad, al tratarse de una organización que “produce un alimento con valor agregado, desde la vaca hasta la góndola”.
La referente señaló que el trabajo en el campo “es una cadena larga y muy sufrida”, pero resaltó la fortaleza de los productores misioneros, a quienes calificó como “los verdaderos héroes del agro misionero” por su capacidad de sostener la actividad “con esfuerzo, fe y amor”.
A pesar de las dificultades económicas, la cooperativa logró abonar puntualmente a sus socios todos los meses durante más de dos décadas, algo fundamental para quienes viven en zonas rurales. “Es un ingreso mensual que garantiza el pago de servicios básicos como luz o internet”, explicó Silva.
La lechería, recordó, es una actividad sin feriados ni descanso, que exige trabajo los 365 días del año. Aun así, la cooperativa se mantiene con capacitación constante: la maestra quesera y los socios participan de cursos y actualizaciones para mejorar la calidad de los productos.
Otro rasgo distintivo es la amplia participación femenina. Silva contó que “desde sus inicios la mayoría del personal son mujeres”, lo que atribuyó a la dedicación y el cuidado que requiere la producción. La presidenta actual, Adriane, lleva varios períodos al frente de la entidad y junto a su esposo se encarga también de la venta mayorista del queso.
La cooperativa elabora tres productos principales: queso barra tipo tybo, queso cremoso y ricotta, con una producción mensual que varía entre 19.000 y 25.000 litros de leche, y en su pico máximo llegó a 60.000 litros. Silva señaló que “el 90% del tiempo no pueden cubrir la demanda”, aunque en verano logran un pequeño stock adicional.
Pese a ser una cooperativa pequeña, Sarandí fue la primera en iniciar la producción de quesos en el Alto Uruguay. Ha sorteado múltiples dificultades logísticas, como fallas en maquinaria o transporte, con el apoyo del municipio de El Soberbio, que colabora en tareas como el traslado de leña para la caldera, aportando camiones y personal.
Silva valoró también el acompañamiento del Estado provincial y nacional, aunque aclaró que aún esperan subsidios para energía y combustible. “Si no llegan, seguiremos igual, pero sería buenísimo tener ese alivio”, dijo.
Actualmente, la cooperativa paga 500 pesos por litro de leche, un monto que sorprendió incluso a productores de otras regiones. “Nos dijeron que es el mismo valor que se paga en La Pampa, así que no estamos tan mal”, comentó.
Consultada sobre los desafíos, Silva mencionó que el principal problema es la falta de participación activa de todos los socios. “Cuatro o cinco terminan tirando del carro. Cuesta que entiendan que la cooperativa son las personas, no el edificio ni el camión”, expresó.
También mencionó las dificultades logísticas y económicas, ya que la recolección de leche implica recorrer unos 150 kilómetros diarios, con caminos rurales complejos y altos costos de energía y combustible. Además, el acceso al crédito es prácticamente imposible. “Los créditos no son para cooperativas como la nuestra”, lamentó.
Silva explicó que la cooperativa no exporta, pero a veces se ve afectada por la llegada de quesos baratos desde otras provincias, lo que complica la competencia. Aun así, mantienen una demanda constante y precios estables: una barra de cuatro kilos se vende entre 28.000 y 30.000 pesos, un valor que calificó como “social, para que todos puedan consumir queso”.
A modo de cierre, Silva reafirmó el compromiso de la cooperativa con su comunidad y adelantó que seguirá promoviendo la participación de las mujeres productoras. “Voy a seguir intentando que nuestras compañeras se animen a contar sus experiencias”, concluyó.




