Un hombre de 34 años y un joven de 22 están detenidos desde el domingo por un asesinato. Uno habló y el otro se negó a declarar cuando fueron indagados por el caso que se investiga.
Ayer fueron trasladados al Juzgado de Instrucción 3 de Puerto Iguazú, los sospechosos por la muerte del brasilero Jorge Lizandro Da Silva (28). Tras designar defensor, el joven de 22 contó lo sucedido y apuntó al otro sospechoso como el que jaló el gatillo. En tanto el de 34 no quiso hablar del hecho.
Tras el acto de lectura de la acusación y las respectivas posturas de los encartados, fueron informados que seguirán detenidos bajo la acusación de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”.
El domingo a la madrugada, Da Silva fue herido de muerte por disparo de escopeta, cuando compartía una ronda de tragos con los sindicados.









