Un reciente informe de la consultora Argendata, en conjunto con la Fundación Fundar, ubicó a Misiones entre las nueve provincias con menor proporción de empleados públicos por habitante del país. El estudio, elaborado con base en los datos del Censo 2022, muestra que la provincia cuenta con 54,5 empleados públicos cada mil habitantes, una cifra ligeramente superior al promedio nacional (53,9) y muy distante de los valores que presentan las provincias patagónicas y del noroeste argentino.
En el ranking nacional, Santa Cruz lidera con 117,7 empleados públicos cada mil habitantes, seguida por La Rioja (114,8), Catamarca (111,4) y Tierra del Fuego (105,9). En el otro extremo aparecen Córdoba (40,3), Santa Fe (45,2) y Buenos Aires (46,7), que registran los índices más bajos del país.
Misiones se ubica en una posición intermedia y con un nivel de empleo estatal similar al promedio general, lo que refleja una estructura administrativa contenida y equilibrada.
El informe destaca que existe una correlación directa entre el tamaño poblacional de las provincias y la proporción de empleo público. Las jurisdicciones más pequeñas tienden a tener más empleados estatales por habitante, debido a que necesitan sostener estructuras básicas de salud, educación y seguridad que, al dividirse entre menos habitantes, arrojan ratios más altos.
En cambio, en los distritos con mayor densidad poblacional y economías más diversificadas, el peso relativo del sector público es menor. El economista Marcos Sequeira, citado por la Red Federal de Periodismo e Innovación (RPI), explicó que “en el centro del país, que incluye a la región pampeana y el Área Metropolitana de Buenos Aires, el empleo privado es el principal motor económico, impulsado por una mayor diversificación productiva”.
Por el contrario, “las provincias del norte y de la Patagonia muestran una dependencia mayor del empleo estatal, donde el Estado actúa como empleador de última instancia ante la falta de alternativas privadas”, agregó.
Composición del empleo
A nivel nacional, el empleo público representa cerca del 17% del total del empleo registrado, según datos del INDEC para 2024. Se distribuye principalmente en tres grandes áreas: administración pública y defensa (55,2%), educación (26,4%) y salud (18,4%). El sector abarca desde administrativos, docentes, enfermeros, policías y personal de defensa, hasta empleados municipales y provinciales en todos los niveles.
De acuerdo con el informe, el peso relativo del empleo estatal en la Argentina (19,3%) supera al promedio de América Latina, estimado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en 11,6%. Sin embargo, entre 2022 y 2024 Argentina redujo su proporción en 1,5 puntos, siendo uno de los pocos países de la región donde el empleo público disminuyó, junto a Colombia.
El relevamiento de Argendata y Fundar también analiza diferencias por género. En todo el país, las mujeres representan el 56% del empleo público, especialmente por la alta presencia femenina en los sectores de educación y salud. Las provincias con mayor participación femenina son San Luis (60,2%), Buenos Aires (58,8%) y CABA (58,7%), mientras que Formosa, Catamarca y Tucumán muestran más alta de varones.

Misiones y su perfil
En este contexto, el nivel de empleo público de Misiones se mantiene estable y controlado, lo que contribuye a su equilibrio fiscal y a la sostenibilidad de las cuentas provinciales.
La política de los últimos años priorizó mantener un Estado activo pero sin expansión desmedida de la planta permanente, concentrando el gasto en áreas esenciales como salud, educación y programas sociales, y complementando con apoyo al sector privado y obras de infraestructura.
Esta moderación en la estructura estatal se traduce en mayor autonomía financiera, en momentos donde las transferencias nacionales discrecionales muestran fuertes caídas.
De ese modo, Misiones aparece como una provincia que combina eficiencia administrativa con estabilidad institucional, sin recurrir a un crecimiento del empleo público para compensar las dificultades del mercado laboral.
El informe de Argendata y Fundar permite, así, dimensionar la diversidad estructural del país: provincias pequeñas con Estados grandes y economías dependientes, frente a otras, como Misiones, que logran sostener niveles moderados de empleo estatal, con un rol público equilibrado y enfocado en la prestación de servicios esenciales.





