Roger Waters, exintegrante de la icónica banda británica Pink Floyd, calificó a Thom Yorke, líder de Radiohead, como “un tipo pequeño y tímido”. Estas declaraciones se dieron en una entrevista para The Katie Halper Show, donde Waters respondió a preguntas sobre Yorke con comentarios directos y críticos.
Durante la entrevista, al mencionarle a Yorke, Waters inicialmente evitó entrar en detalles, pero luego afirmó: “Creo que es una compañía desagradable”. Además, reveló que le había escrito varias cartas y que Yorke respondió con un tono sarcástico e intentó ser gracioso. Waters adelantó que esas cartas y la conversación serán parte de sus memorias.
El conflicto entre ambos artistas también tiene fondo en discrepancias públicas sobre temas políticos. El 30 de mayo, Thom Yorke publicó una extensa declaración en Instagram expresando su postura sobre la situación en Israel y Palestina. En ella explicó que su “silencio” durante un grito recibido en Melbourne se debió a su respeto por las personas afectadas por la crisis humanitaria, y aclaró que este asunto afectó su salud mental.
Yorke destacó que su silencio no implicaba simpatía con ninguna forma de extremismo o deshumanización, sino un gesto de respeto hacia quienes sufren. A su vez, criticó el conflicto y la manera en que se interpretaron sus actos, lo que le costó encontrar una forma adecuada de comunicar su posición durante la gira.
Roger Waters ha sido crítico repetidamente con Yorke y su banda por sus posturas en relación con el conflicto de Israel-Palestina. Desde 2011, Waters apoya públicamente el movimiento BDS (Boicot, Desinversiones y Sanciones), que busca presionar a Israel para que termine con lo que considera opresión hacia los palestinos.
En 2017, cuando Radiohead anunció un concierto en Tel Aviv, el movimiento BDS emitió una carta advirtiendo que tocar en Israel implicaba apoyar un Estado acusado por relatores de la ONU de imponer un “sistema de apartheid” al pueblo palestino. Yorke respondió públicamente rechazando el boicot cultural y criticando la falta de diálogo directo de quienes protestan.
En la polémica, Waters comentó que Yorke malinterpretó su intención de diálogo como una amenaza. En 2024, se supo que ambos artistas intercambiaron correos donde Waters intentó abrir un canal de conversación, pero Yorke lo criticó por falta de “decencia o gracia”. Waters le respondió señalando que varios en el movimiento BDS también intentaron dialogar sin éxito.
La discusión concluyó con Waters calificando a Yorke de manera contundente: “¡El tipo es un completo idiota!”. Así se mantiene la tensa relación pública entre estos referentes musicales, marcada tanto por diferencias personales como por posturas políticas encontradas.
Fuente: Revista Rolling Stones









