En el día en que se conmemora el 205º aniversario del fallecimiento del insigne abogado y general Manuel Belgrano, se celebra el Día de la Bandera Argentina, creada por el prócer. En el Museo existente en el predio del Parque de las Naciones de Oberá se encuentra exhibida una bandera nacional que, en febrero pasado, acumuló 100 años, contados desde su adquisición, en Posadas, en 1925, por Juan Oscar Wickström, uno de los pioneros de Yerbal Viejo, que, con su familia, emigrara desde el Paraguay, donde residió desde fines de 1913 hasta fines de 1924.
Cruzó hacia la Argentina debido a la inseguridad y al ataque que fuera objeto su casa durante la breve guerra civil dirigida por el coronel Adolfo Chirife entre 1922 y 1923. Ya en Yerbal Viejo, esta bandera fue izada en su vivienda en ocasión de las fechas patrias nacionales, siendo -con toda seguridad- una pieza histórica única, conservada por su hijo Lloyd Oscar y luego por su nieto Lloyd Jorge, nacido en Oberá, quien la donó al Municipio, junto a todos los objetos de su museo particular.

Según refirió su nieto, su abuelo le había relatado que, cuando había emigrado desde el Canadá al Paraguay, instalándose en Colonia Nueva Australia, ubicada en cercanías de Coronel Oviedo (antes Ajos), la que contaba entre sus pobladores a inmigrantes originarios de Australia, hablantes del idioma inglés y miembros de la Iglesia Anglicana, los nativos paraguayos, de religión católica, no los veían con simpatía y los llamaban “gringos”. En cierta oportunidad, le fue sugerido a Juan Oscar que adquiriera una bandera del Paraguay y la exhibiera en su domicilio en las fechas patrias de esa nación, acción que causaría buena impresión a los nativos como prueba de respeto al país que los recibiera. Así lo hizo.
Al llegar a Posadas, Juan Oscar recordó el buen consejo, por lo que demostró que también en Argentina sería un gesto grato a los nativos engalanar su domicilio con la bandera del país. También lo hizo y la azul y blanca estuvo, a través de los años, flameando en su residencia en la Colonia Yerbal Viejo, luego Oberá, en las fechas patrias.
La bandera argentina referida estuvo presente en el acto fundacional de Oberá, el 9 de julio de 1928, realizado en la esquina de las actuales calles 9 de Julio y Santa Fe, en el predio de la hoy plaza San Martín, lugar cubierto entonces por un frondoso monte. En tal ocasión, la bandera fue portada, teniendo por asta una tacuara, por Adri Elizabeth, tía de quien relata este pasaje histórico.

La centenaria bandera nacional también estuvo izada en el mástil que fue colocado por Juan Oscar frente a su domicilio, en la calle Buenos Aires 54, junto a otro mástil donde fue izada una bandera de Suecia, en ocasión de la visita a Oberá en 1947 del Príncipe de Suecia y Noruega, Guillermo Bernadotte, hijo del Rey Gustavo V Adolfo Bernadotte (casa real aún reinante), juntamente con su hijo el Conde Lennart y su esposa Karin Nissvandt.
Esa bandera de Suecia fue adquirida por Wickström en octubre de 1903, cuando emigró a los Estados Unidos de Norteamérica, radicándose en San Francisco, donde tenía una inmobiliaria (se había recibido de corredor inmobiliario y seguros en el “United States Real Estate Institute”, de Nueva York, el 15 de julio de 1909) y le acompañó cuando se trasladó a Vancouver, Canadá, donde también instaló una inmobiliaria. Posteriormente se radicó en el Paraguay y luego en la Argentina, por lo que, tal bandera, contabiliza 122 años de antigüedad. Hoy se encuentra mejor conservada que la Argentina, ello en razón a que los colonos extranjeros, por disposición del Ministerio de Relaciones y Culto de la Nación, únicamente podían hacerla pública en los días nacionales de sus países de origen. Así, los italianos fueron autorizados en octubre de 1940 a hacerlo los 28 de ese mes y el 4 de noviembre, y los suizos, autorizados el 16 de julio de 1942, a enarbolar su bandera el 1º de agosto, en conmemoración de la fundación de la Confederación Helvética en 1291.
Oportuno es referir que el 6 de junio pasado la colectividad sueca de Oberá celebró el Día Nacional de Suecia (anteriormente Día de la Bandera), memorando a Lloyd Jorge Wickström, que en esta fecha sus abuelos reunían a la familia para la celebración, como lo hacían en el día del cumpleaños del Rey Gustavo V y luego de su fallecimiento en 1950, el de su sucesor Gustavo VI Adolfo, celebraciones perdidas tras el fallecimiento de los abuelos en 1967.
Formó, a sugerencia de Wickström, en 1927, una logia masónica denominada “Vikingardan Order”, cuyos miembros debían ser de origen escandinavo (suecos, noruegos, daneses y finlandeses de origen sueco) y hablar sus respectivos idiomas, a semejanza de la “Lodge Fylgya Nº 119 – Wasa Order of América”, de San Francisco, de la cual fue miembro, como lo fue en la “Logia Vancouver Nº 31 SB-OA”. En el salón donde se reunían estaba esta bandera junto a la argentina, como las de los otros países nombrados.
Este Diario, años atrás, entrevistó a Lloyd Jorge Wickström, con motivo de conmemorarse el centenario del fallecimiento de Manuel Belgrano, y en tal oportunidad exhibió un afiche impreso en papel prensa, donde se publicaba el programa de los actos para celebrar el Día de la Bandera Nacional, en Posadas y el Territorio Nacional. Este documento, bajo vidrio, contabiliza 105 años y, también con certeza, debe ser el único conservado en la provincia.

Oportuna es la ocasión de esta nota dedicada a la celebración de la Bandera Nacional, para citar que la bandera argentina de tela, que flameó en Puerto Aguirre (hoy Puerto Iguazú) el 20 de junio de 1906, fue confeccionada y bordada con el Sol de Mayo con hilos dorados, por Leonor Gutiérrez, tía abuela de Lloyd Jorge Wickström, sol incorporado por el Congreso de Tucumán el 25 de febrero de 1818 a la bandera original aprobada el 20 de julio de 1816, la que fue entregada en un cofre de madera a Jordán Hummel, capitán del barco “España”, para su traslado al destino citado, conservando Wickström el dedal de plata utilizado para la confección y bordado del sol.

Como colofón, en 1939, la Asociación del Magisterio de Yerbal Viejo promovió la creación de una Comisión Popular Pro Mástil, la que fue creada estimando el costo de la construcción en $3.000,00, aportando la población el dinero. Así, el Club Atlético Oberá aportó una moneda de un oro argentino, un festival en el Circo Armengol reunió $78,60, entre muchos otros, y, a noviembre, se habían recaudado $1.194,45. La Comisión fue presidida por el director de la Escuela Nº 185, Juan Areco, y Lloyd Oscar (padre de Lloyd Jorge) integró la Comisión Pro Mástil de Oberá, y su esposa Josefina Gutiérrez Brower, la Comisión de Damas, que recolectaron los fondos para su erección. Se colocó la piedra fundamental el 23 de junio de 1940, siendo quien redactó el Acta Fundacional, introducida en un cilindro, juntamente con un ejemplar del diario “Oberá”, publicado por Irineo Moreira, y uno del bisemanario “El Vocero Regional”, publicado entre 1939 y 1952 por Lloyd Oscar, además de ejemplares de las monedas de 0,05, 0,10 y 0,20, circulantes en ese año. El mástil fue inaugurado el 19 de agosto, en homenaje al Padre de la Patria, el General José de San Martín.
Son estas referencias, algunas, plasmadas en el libro “Historias y Relatos Desordenados”, publicado por Lloyd Jorge Wickström en 2024.





