Soñar e imaginar nuestro futuro es muy bueno, es sano y da sentido a nuestra vida. Casi todo lo que nos propongamos es posible llevarlo a cabo, pero para eso debés estar con mente positiva y en armonía. ¿Cuesta? Claro que sí, pero para ello lo fundamental es tener claro el objetivo y establecer las metas.
Verificar que se trata de un sueño propio y no del resultado de una presión exterior, para organizar nuestras energías en forma inteligente, verificar si son alcanzables, experimentar la satisfacción de que estamos avanzando en el logro de nuestros sueños. Lo puedes hacer antes de desayunar mientras estás tomando el vaso de agua ya estás visualizando que será un día de avance en el sueño que estás programándolo. Esto debe hacerse con respiraciones profundas.
No hay límites para soñar y avanzar. Recuerden amigos, los límites los ponemos nosotros y las posibilidades reales con las que contamos en la vida.
A veces no nos atrevemos a muchas cosas porque las dudas nos asaltan y las vemos como difíciles porque no nos atrevemos a hacerlas.
Entonces a romper barreras, a pensar que las personas con metas triunfan y la posibilidad de realizar sueños es lo que hace que la vida sea interesante y tener proyectos nos hace lucir juveniles, con luz y con empuje porque en la mente está la idea de cumplir una tarea por día.
Cuántas veces nos imaginamos estudiando una carrera que descubrimos que es nuestra vocación, cuántas veces soñamos con un mejor trabajo y más adecuado a nuestras capacidades y necesidades económicas.
Soñemos y movámonos hacia esos sueños hasta que se hagan realidad. Si seguimos nuestra mente y lo que nos indica el corazón, tomaremos decisiones con sabiduría y nuestro camino hacia la consecución de nuestras metas será motivador y tendremos paz y alegría.
Elena Cacerez Echevarria
Cosmiatra
WhatsApp 3764-362902








