Antes de toda creencia, antes del miedo, antes del condicionamiento ya éramos abundancia. No como una posesión, sino como una frecuencia. No como una meta, sino como una esencia porque la abundancia no se conquista, se recuerda.
Somos hijos de un Universo generoso, que florece sin esfuerzo, que da sin medida, que no conoce la escasez. La naturaleza no duda de su provisión, el árbol no teme que le falten frutos, el río no teme quedarse sin agua. Solo el ser humano, desconectado de su origen divino, comenzó a creer en la carencia.
Pero esa ilusión puede desvanecerse con un solo acto de presencia. Basta cerrar los ojos, silenciar el ruido y sentir el pulso del corazón, ese ritmo sagrado que nos recuerda que ya estamos siendo sostenidos, amados y nutridos.
La verdadera abundancia no se mide en lo que tenemos, sino en lo que somos capaces de reconocer. Es un estado del alma que ve bendiciones en cada rincón, que agradece antes de recibir, que comparte sin temor a perder. Porque quien vibra en abundancia sabe que lo esencial jamás escasea. El amor, la paz, la alegría, la creatividad brotan sin cesar cuando el canal está abierto y cuando nos alineamos con esa frecuencia divina, la vida responde. Lo que necesitamos llega. Lo que ya no sirve, se disuelve y lo que es para nosotros, se manifiesta con gracia.
La consciencia de abundancia no es una promesa futura, es un retorno al hogar interior. Es recordar que ya somos completos, que ya somos uno con la Fuente que todo lo da. Es vivir desde la certeza de que la vida conspira siempre a favor del alma que confía.
Entonces, respira, agradece lo que ya es y camina con la certeza de quien ya ha recibido porque la abundancia no se busca afuera: se enciende dentro.
Oración para Activar la Consciencia de Abundancia:
“Amada Fuente de Todo lo Que Es, que habitas en cada partícula de luz y en cada latido de mi ser, hoy suelto toda ilusión de carencia, toda creencia en la escasez y abro mi corazón a la verdad sagrada: Yo soy un canal perfecto de tu abundancia infinita. Gracias por recordarme que no necesito luchar para merecer, que no necesito acumular para sentirme valioso, que ya soy completo, ya soy digno, ya soy uno contigo.
“Que cada célula de mi cuerpo vibre en plenitud, que cada pensamiento se alinee con tu generosidad y que cada acción nazca desde la certeza de que todo lo que doy, vuelve multiplicado.
“Hoy elijo confiar.
“Hoy elijo agradecer.
“Hoy elijo abrir mis brazos al milagro de recibir. Así sea y así es. ¡Hecho está!”.
Nos vamos acompañando.💖
Karina Holoveski
Mujer Medicina-Chamana.
WhatsApp: 3765-110223








