Mientras estuvo la terminal de ómnibus de Posadas hace 25 años, la avenida Uruguay de la capital provincial fue una importante arteria de acceso y egreso. Sin embargo, con el traslado de la misma a la avenida Santa Catalina y Quaranta y las nuevas manos únicas, la Uruguay se convirtió en un eje comercial de la ciudad.
Entrados los años 2000, se empezó a debatir qué hacer con esta importante arteria, sin que hasta el momento se haya producido un consenso suficiente para ejecutar un proyecto de remodelación o refuncionalización.
En esta segunda gestión de Leonardo “Lalo” Stelatto, la comuna posadeña retomó la idea de potenciar su perfil comercial y generar cambios en ese sentido así lo admitió Daniel Vigo, coordinador de Obras y Servicios Públicos de la Municipalidad de Posadas en diálogo con Radio República.
“La idea que se tiene sobre la avenida Uruguay es darle otra mirada. En su momento fue de acceso a la ciudad, porque estaba la terminal vieja y la antigua ruta 12 terminaba en su inicio. Hoy es una avenida comercial, con lo cual los anchos de calzada, los semáforos y las veredas, generan una velocidad alta: 50 a 60 km/h hasta Trincheras, cuando se produce un movimiento mayor por la cercanía al centro de la ciudad”, indicó.
Fue en 2013, durante la gestión del exintendente Orlando Franco, cuando el Banco Mundial había habilitado un crédito de 15 millones de dólares para la refuncionalización.
Se pensó en una avenida paseo con características parecidas a la costanera en cuanto al arbolado, veredas y alumbrado.
Sin embargo, hubo disparidad de criterios con la Cámara de Comercio y otros sectores que fueron parte de un taller en el que se analizaron alternativas como: ensanchado de 45 centímetros de las veredas; posibles carriles centrales para el transporte de colectivos; un bulevar central entre los carriles de colectivos; dársenas de estacionamiento para camiones con el fin de carga y descarga; entre otras propuestas.
En 2025, Daniel Vigo confirmó que retomaron la idea de un bulevar, uno de los ejes cuestionados hace más de una década atrás. “Se piensa en darle una impronta comercial, bajando más la velocidad, para que los comerciantes frentistas puedan trabajar. En eso se pueden hacer carriles menos anchos, con un bulevar en el medio de la calzada”.
Precisó que el ancho completo de la avenida Uruguay es de 17 metros cuando, por ejemplo, la avenida Bustamante hacia el oeste “tiene un ancho de 15 metros donde entran cuatro carriles”.
De todos modos aclaró que no hay ninguna definición al respecto y que sigue siendo parte de un análisis hasta que se confirme cómo serán las futuras obras.
Seguridad
Mientras se fueron postergando las mejoras, la avenida Uruguay debió ir incorporando medidas de seguridad, capaces de prevenir siniestros viales y tragedias en la misma, por el cruce de carriles, las altas velocidades, y las maniobras de autos y motos por llegar de una mano a la otra doblando en U.
Fue el 21 de julio de 2014 que se impidió el giro a la izquierda de norte a sur. Y a fines de junio de 2022 pusieron separadores plásticos desde el mástil hacia Barrufaldi para impedir cruzarse de mano, tras varios siniestros en la zona.







