Y de pronto un día, la familia se vio inmersa en una oleada de pedidos, recortes, moños, tijeras, letras, mensajes y con la adrenalina a borbotones.
Hoy, las protagonistas son Marisel y Noelia Pedrozo, aunque siempre hay un “detrás de…”, donde están mamá, papá y hermanos. Todos están en modo Sublime-Arte produciendo, creando, diseñando y atendiendo de forma personalizada los pedidos especiales. A esa amiga incondicional, una mamá, un hermano, un reconocido compañero de trabajo, alguna abuela cariñosa, el abuelo, tantos a los que deseamos demostrarles nuestro cariño y ellas te hacen posible el sueño.
Todo comenzó cuando Marisel se vio recibida, luego de la pandemia y sin ofertas laborales. “Mis hermanos plantearon el tema de la sublimación, había que conseguir la herramienta y sin tener idea de qué se trataba dije que sí”, relata con pasión este proceso.
Contó que sin pérdida de tiempo se puso a “investigar y estudiar cómo se trabajaba con la sublimación, qué tipo de productos podían tener una salida, fui aprendiendo de manera autodidacta. Mis hermanos veían que me era fácil el tema del diseño y así fui creciendo. Poco a poco fui teniendo clientes, empecé con tazas y a medida que fue pasando el tiempo fuimos adaptándonos a las propuestas de los clientes.
Arranqué yo, luego se sumaron mi mamá, mi hermana y nos convertimos en un emprendimiento familiar, incluyendo a mi papá que siempre aporta ideas y nos ayuda en lo que necesitamos”.
Inquietas y sintiéndose cada vez más seguras, Noelia, quien se dedicaba principalmente a la difusión decidió despegar sus alas y dejar volar su talento, entonces se produjo la magia.
Ella nos cuenta que “este año llegaba el Día del Amigo y nos preguntamos: ‘¿Qué podemos sumar?’, y surgió la idea de hacer velas. Así como Marisel con la sublimación y el diseño, yo empecé de manera autodidacta a mirar videos, videos y videos. Después compré los insumos y comencé a prueba y error, pero muchas pruebas y muchos errores porque no es fácil tomarle el punto a las temperaturas que cambian según lo que vas utilizando como tintes, aromas, y más detalles”.
Bueno, talentosa como la hermana y también su madre Rosana, logró implementar “de molde alto punto de fusión, de bajo punto de fusión, implementé colorantes y aromas. Fui descubriendo un mundo inmenso y maravilloso”.
Noelia confiesa que ahora “puedo pasar horas y horas. Si me piden souvenires estoy empabilando, algo que lleva mucho tiempo o estoy siempre haciendo algo, buscando elementos de la naturaleza para sumar a la decoración porque estamos pendientes del destinatario, para lograr algo realmente especial y único. Ya sumamos los box de regalos con tazas, jabones, velas, sahumerios, con lo que vamos viendo que puede hacer feliz a esa persona que recibirá el presente. Queremos que se sorprenda, que se sienta agasajada y que sienta el cariño de quien le hizo el regalo”.
Como toda la familia participa, esta sensación de placer y satisfacción también se multiplica y todos siguen participando porque esto tiene una mirada a futuro, no descansarán hasta convertirse en empresa. No dudamos en que lo lograrán, Sublime-Arte será el motivo de todos los brindis.
Es más, Noelia quien es profesional y también tiene otro trabajo, confiesa que descubrió un mundo “emocionante, amplio, te ayuda a abrir tu cabeza a la imaginación, es increíble todo lo que hay en velas, pero también en packaging, imágenes, etiquetas, y tanto por seguir descubriendo.
En este momento reciben pedidos para los regalos de fin de año porque las sorpresas serán más mágicas cuando le dan tiempo a su creación y elaboración.
* Pedidos: Instagram: Sublime Arte | Sublimación • Deco • Diseño @sublime.arte.ar +5493764854249
Por Rosanna Toraglio- [email protected]