En los últimos tres años los ríos y arroyos de la región vieron severamente afectados sus caudales por la escasez de precipitaciones. El bajo nivel de los cursos de agua (foto) había generado preocupación entre los especialistas que investigan sobre la fauna íctica, ya que advertían que no estaban dadas las condiciones para el desove de los peces.
Sin embargo, en las últimas semanas esa situación cambió. Primero fue por la apertura de vertederos en Itaipú, que marcó una primera recuperación del caudal del río Paraná; y luego las lluvias hicieron que el río creciera rápidamente y volvieran los ambientes propicios para la reproducción de nuestros peces.
Luego de una serie de muestreos realizados en Corrientes, investigadores del Instituto de Ictiología del Nordeste (INICNE) confirmaron que el repunte del nivel del río derivó en un impactante proceso de reproducción de las principales especies. La licenciada en Ciencias Biológicas y becaria del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Paula Bertrán, adelantó a la radio de la Universidad Nacional del Nordeste los detalles del relevamiento que realizó.
“Hicimos un muestreo el lunes de la semana pasada y encontramos algunos bagres, bogas, sábalos y dorados. El jueves volvimos a muestrear y vimos que la reproducción sigue. Esto tiene que ver con los movimientos del río que generan una explosión como ya ocurrió entre octubre y noviembre de 2022 cuando vimos movimientos de reproducción”, explicó. En esa oportunidad también el río había elevado su caudal, orillando en la ciudad de Corrientes los cinco metros, 60 centímetros menos que esta semana.
“Mediante muestreos de ictiopláncton capturamos larvas y podemos decir que hay reproducción de distintas especies. Cuando traemos esas muestras al laboratorio vemos sus características a través de una lupa, como por ejemplo los bigotes en los silúridos”, explicó Bertrán.
Sobre el trabajo de campo, contó que “los muestreos los realizamos con redes de 200 micras, similares a las que se usan para cazar mariposas, la dejamos unos minutos en el canal de navegación y después volcamos el contenido en un recipiente con alcohol”.
“Para que la reproducción sea exitosa, las condiciones ambientales deben ser favorables: el caudal del río debe seguir así y los pequeños peces deben tener alimento con el correr de los días para seguir creciendo. Hay que aclarar que no todas las larvas sobreviven y llegan a ser juveniles o adultos”, explicó la investigadora.
Bertrán indicó: “Además de ver que hay reproducción de estas especies, buscamos tener más información de su biología y saber que estos movimientos de agua ayudan. Es importante que el río se mantenga en estos niveles”.
Desde el Instituto Nacional del Agua (INA), en tanto, señalaron que el caudal de los ríos se mantendrá elevado durante el mes en la zona de la ciudad de Corrientes por efecto del aumento del aporte del río Paraguay sobre el río Paraná y el lento retorno de las precipitaciones en las altas cuencas.