El receso escolar permitió al Gobierno provincial refaccionar algunos de los edificios escolares que requerían una inmediata intervención para garantizar un espacio seguro y adecuado para el aprendizaje. No obstante, mientras que algunas obras estarán listas para su estreno al regreso de las clases, otras siguen en proceso y algunas apenas muestran avances y eso genera mucho enojo en sus respectivas comunidades escolares.
Entre las más avanzadas y que podrán ser disfrutadas desde el primero de marzo por docentes y alumnos se encuentran la Escuela 218 de Colonia Aurora que en los próximos días recibirá un refuerzo en mobiliario.
También está listo para inaugurarse el nuevo edificio de la Escuela 238 del barrio Parque Adam de Posadas, solo restan algunos detalles en el exterior y la entrega de mobiliario. En Wanda, la construcción del edificio de la EPET 48 también está en su etapa final y todo indica que las instalaciones estarán habilitadas en los próximos días.
Más lento de lo esperado
En Oberá, en tanto, varias instituciones educativas iniciarán las clases con obras de construcción inconclusas. Entre las más destacadas, por la protesta de padres y alumnos para que se contemplen los arreglos, están la Escuela de Comercio N° 1, la Escuela 926 de Villa Stemberg y el BOP 112, que espera nuevo edificio.
En el caso de la Escuela de Comercio Santiago de Liniers, los techos de un sector se encuentran en estado crítico, con posibilidad de derrumbe. No obstante, según explicó su directora, Graciela Sowinski, “si bien no está a la vista el movimiento, las estructuras del techo del tinglado se arman en una empresa que está en Aristóbulo del Valle, luego vienen acá y montan todo, por eso no se ve movimiento ahora, pero la obra está en marcha, son dos empresas trabajando que se dividen las tareas, eso nos pone muy contentos. Ahora vemos cómo nos adaptamos al edificio viejo para el inicio de clases”.
Por su parte, aún están en construcción las aulas y sanitarios de la Escuela 926 de esta localidad. La primera etapa de la obra, prevista luego de toma de la escuela por parte de padres, familiares y alumnos, se inicio en el 2019. En marzo del 2020 debía continuar, pero eso no ocurrió. En agosto del 2021, manifestación mediante, el Gobierno provincial a través del Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (IPRODHA), volvió a asumir el compromiso y los trabajos se retomaron en septiembre. No obstante, a pocos días del inicio del ciclo lectivo, la obra todavía no se terminó.
“Parece que llevaron un ladrillo por día”, expresó una madre. “Sabemos que la directora mandó notas el año pasado. Porque ella misma nos mostró la respuesta del IPRODHA de acelerar la obra, fue en septiembre del año pasado. Los padres estamos organizándonos, porque no puede ser que en cuatro años no hayan terminado”, remarcó.