Con una llamativa coartada, el conductor de 37 años detenido durante la madrugada del sábado pasado tras colisionar de frente a una motocicleta y quitarle la vida al suboficial Ángel Silvestre Grance (37) y lesionar a su esposa (25), intentó aliviar su situación procesal y responder durante la indagatoria realizada el lunes ante el juez de Instrucción 6, Ricardo Walter Balor.
Según fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, el sospechoso adujo que la camioneta Ford modelo F100 que manejaba es naftera y que para ahorrar combustible y dinero transitaba por tramos de bajada o planos con el motor apagado y que no pudo reaccionar a tiempo para ayudarse con el motor para desacelerar, frenar y evitar la colisión contra la motocicleta que conducía Grance. La versión en indagatoria, al menos en lo inmediato, no fue recibida con suficiente sustento para que se le otorgue la excarcelación que solicitó su abogado defensor.
Por el contrario, la opinión formal del fiscal de Instrucción 6, René Germán Casals fue la de rechazar tal beneficio ante la gravedad del delito y la instancia de la causa. Y que, cuando correspondiere, la caución o fianza para salir de su celda de comisaría sea real, en efectivo.
El siniestro vial se registró en la zona sur de esta capital, en el barrio Los Patitos, y la víctima fatal fue Grance, quien prestaba servicio de seguridad en Casa de Gobierno.
El trágico desenlace se registró pocos minutos de las 0.30 en el cruce de las calles 79 y 220. Grance manejaba una motocicleta 110 centímetros cúbicos y no logró esquivar a la camioneta Ford F100 azul.
El impacto tuvo la fuerza determinante para provocar el óbito en el acto del suboficial, mientras que su esposa, identificada como Malena Agustina Da Rosa, de 25 años, fue llevada al Hospital Ramón Madariaga para las primeras intervenciones en el sector de Urgencias.
Las primeras medidas del juez fueron la de ordenar la autopsia pero también las pericias al conductor de la F100 y residente en el barrio Néstor Kirchner, hacia donde se presume que retornaba cuando se produjo el choque.
Cuando se confirmó que el test de alcoholemia le dio positivo al conductor, 1,94 gramos de alcohol por litro de sangre, quedó detenido por “homicidio culposo en accidente de tránsito”.