La creencia de que usando protector nos bronceamos mejor es común, pero también la pregunta es ¿me debo proteger los días nublados?
El riesgo de padecer cáncer de piel está siempre latente en cualquier edad y en cualquier parte del cuerpo, aunque lógicamente más habitualmente en las partes más expuestas.
Las preguntas que a veces nos hacen sobre todo los jovencitos es: ¿el sol produce cáncer? Está comprobado que de cada tres tipos de cáncer de piel, dos son causados por el sol. Siempre contesto que la piel tiene memoria porque los daños solares se acumulan en la piel en forma progresiva.
Otra cosa, el sol no es igual de nocivo en todo el cuerpo y a cualquier hora porque algunas zonas son más propensas que otras. Esto se debe a que el reparto de melanina es desigual.
Siempre les recuerdo los horarios peligrosos que van desde las 11 hasta la 16, les aclaro además que el factor de protección solar elevado no impide el bronceado sino que los protege de las quemaduras y el bronceado durará más tiempo.
Uno de los errores que se cometen es creer que una vez que el cuerpo está bien bronceado ya no se necesita protector.
Nunca me canso de aclararles que los días nublados también deben proteger la piel, porque el 90% de los rayos UV atraviesan las nubes. A mis pacientes mayores les recuerdo que la continua exposición al sol deteriora la piel en un 75%.
Tomados en pequeñas dosis, los rayos ultravioletas son una medicina natural para el estado de ánimo, para la renovación de la epidermis, para mejorar algunas enfermedades como dermatitis atópicas, psoriasis, dermatitis seborreica, etc. Y para la producción de vitamina D.
Sin el sol seríamos raquíticos y en las mujeres previene la osteoporosis.
A los niños se les debe aplicar protectores solares cuando se exponen al sol. La diferencia con los adultos es que la frecuencia de aplicación debe ser tres veces mayor.
Los rayos UVA y UBV se emiten todo el día y pueden atravesar la mayoría de los cristales por eso al salir de viaje en auto, siendo conductor se debe usar protector para el rostro, las manos y brazos.
Otros tips
Usar prendas blancas bajo el sol, protege más que las oscuras. El gel post-solar debe permanecer en la heladera y en su contenido deben estar presentes aloe y menta por ser regeneradores de la piel.
Antes de ir a la playa podés preparar infusión de manzanilla y caléndula, dejas enfriar, colarla varias veces, luego colocarla en un recipiente con atomizador y en la heladera. Al regreso de la playa te aplicas esta bruma hidratante preparada por vos.
La mayoría de los protectores solares son resistentes al agua y tienen acción prolongada, te sugiero aplicártelo cada dos horas y la primera vez media hora antes de exponerte al sol.
Bronceada sin que la piel pague sus consecuencias.
