Una mujer denunció en la Comisaría de la Mujer de Montecarlo que su hija de 11 años, perteneciente a la comunidad mbya Perutí, no quería ir a la escuela por el acoso recibido por parte de su profesor de educación física. La menor asiste al Instituto Hogar Perutí 1207, dependiente del SPEPM, ubicado en El Alcázar.
En un primer momento, se trabajó en el interior de la comunidad, donde se intentó mediar en la situación, por eso, primero consultaron a la Junta de Educación Católica del Obispado de Iguazú. El docente acusado expresó por escrito que “nunca tuvo un acercamiento ni contacto físico con la alumna que significara acoso” y argumentó que la denuncia “se debe a la exigencia a la niña para que haga educación física”.
Sin embargo, la menor aseguró que este docente tuvo un acercamiento inapropiado con ella en varias oportunidades. Fue entonces que la madre de la niña decidió radicar la denuncia. Por su parte, el profesor de educación física solicitó una licencia por 30 días a partir del 11 de mayo para atención de un familiar. Al no obtener respuestas y con el temor del regreso de este docente a la institución, decidieron hacer pública la denuncia y relatar todo ante la Policía.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, la madre de la menor ratificó lo denunciado y relató que su hija en un momento confrontó a su padre porque no quería volver más a la escuela. Entonces, al indagar en los motivos, la chica contó que “desde hace tiempo el profesor la molestaba” y por este tema acudió primero a un maestro, aunque no tuvo soluciones. Más allá de asegurar que no hubo un tocamiento, detalló a la familia que “este profesor le decía si no quería ser su novia, que era muy linda. Incluso durante una clase, cuando fue en pollera le pidió que se agachara”.
De igual forma, según lo que consta en la denuncia, los propios compañeros de escuela acusaron al profesor de prestar más atención a esta alumna que al resto de los chicos. La madre de la menor remarcó que su hija no quiere volver a esta institución y que los directivos no comunicaron nada de qué pasará con este profesor una vez que finalice su licencia.
En comunicación con este Diario el cacique de la comunidad Perutí, Cristian Cabrera, comentó que están muy preocupados porque “todo esto sucedió en la escuela durante las horas de clase”. Mientras intentaban hacer una intervención desde dentro de la institución “este profesor sacó licencia por 30 días y no vino más hacia la escuela”.
l cacique aseguró que “es la primera vez que sucede un caso como este”. No obstante, remarcó que “del profesor sabemos que anteriormente tenía una novia que fue en su momento una de sus alumnas”.
