Este viernes 18 de febrero se publicó en el boletín oficial de la Nación el decreto 78/2022 mediante el cual, el presidente Alberto Fernández, desplaza a Ignacio “Nacho” Barrios Arrechea del cargo de Director Ejecutivo de la Entidad Binacional Yacyretá y lo reemplaza por el formoseño Fernando de Vido.
En el mismo documento se acepta la renuncia de Alejandro Valerio Sruoga como consejero y se designa en su reemplazo, en el mismo cargo, a “la doctora Ana Claudia Almirón”, una correntina de 37 años que fue senadora nacional por el Frente de Todos y milita en La Cámpora.
El decreto no profundiza en los motivos del reemplazo y solo abunda en cuestiones técnicas. Pero desde hace varias semanas era un hecho, y PRIMERA EDICIÓN lo confirmó, que el misionero tenía los días contados y sería reemplazado por el formoseño.
Hace algunas semanas se habían reunido para acordar la transición. Este Diario pudo saber detalles de la reunión que tuvieron el exintendente de Formosa, Fernando De Vido y Barrios Arrechea.
Según las fuentes consultadas, se trató de un encuentro cordial donde el formoseño preguntó por temas de su interés respecto al funcionamiento de la EBY.
En ese momento acordaron que, hasta que salga el instrumento legal de designación, el misionero continuaba decidiendo las cuestiones menores de la administración, pero de tener que tomar medidas o acciones que impliquen fuertes erogaciones o con impacto a mediano o largo plazo, antes debía hablar con De Vido.
Un año y medio
Barrios Arrechea se mantuvo en el cargo por poco más de 18 meses, desde el 10 de junio de 2020 que fue confirmada su dirección. Sin embargo, tras los resultados electorales de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias como de las legislativas generales de noviembre pasado, se precipitó la salida del Gobierno.
Así, el pasado 18 de enero PRIMERA EDICIÓN tuvo la confirmación del propio Barrios Arrechea de la presentación de su renuncia. “Estoy en el cargo hasta que me acepten la renuncia, me pueden aceptar ahora, o en un mes, o nunca”, dijo entonces y evitó hablar de las razones por las cuales presentó su dimisión.
Al misionero se lo vinculó siempre como un referente de La Cámpora, que dirige Máximo Kirchner. Incluso se lo presentó como una imposición del Instituto Patria, el espacio que lidera la vicepresidenta de la Nación Cristina Fernández. Sin embargo, en soledad, terminó afuera de la EBY
Cuando fue consultado por este Diario si era víctima de la interna kirchnerista, dijo: “Nunca sentí la interna en sí, no tengo un pedido de la línea de Alberto o la línea de Cristina”.
Sin embargo, en los últimos días se precipitaron algunas versiones que lo señalaban cerca de algunos políticos y empresarios de Juntos por el Cambio, incluso trascendió que ayudó económicamente a algunas empresas de ese espacio durante la campaña.
Esto no cayó nada bien en la Campora de Misiones, que habría hecho llegar su queja a Buenos Aires, sobre todo por el mal resultado electoral de los liderados por la diputada nacional Cristina Brítez y su marido. Y esta habría sido la causa que desencadenó la salida.