El 4 de octubre se celebra el Día Mundial de los Animales en conmemoración de San Francisco de Asís.
Este santo, que nació en 1182 en Italia, dejó como enseñanza a la humanidad que debemos comprender cuál es nuestro lugar en la Tierra, ya que el bienestar de nosotros está integrado al bienestar de todos los animales y el medio ambiente.
En los años que vivió San Francisco de Asís estas ideas se veían con extrañeza. Es por esta razón que se considera que se adelantó a su época.
Este santo en su vida decidió despojarse de todas las riquezas materiales y se dedicó a servir y ayudar no sólo a sus semejantes, sino también a todos los animales, a los que consideraba hijos de Dios y llamaba “hermanos”.