Antes, durante y después de su participación en los Juegos Paralímpicos 2020, la obereña Mahira Bergallo repitió a quien quiera escuchar que ella ya ganó. Y sin dudas que así fue, porque la obereña hizo su debut histórico en el estadio Olímpico de Tokio y mantuvo su marca personal ante una intensa lluvia.
Con sólo 19 años, Mahira se presentó ante las mejores de la prueba de lanzamiento de bala e igualó su mejor marca personal con 7.76 metros y obtuvo un diploma olímpico al finalizar en el séptimo puesto.
Superar adversidades es una materia que Mahira lo desarrolló muy bien, por eso no le importó que en su primer intento se haya resbalado y su lanzamiento fue nulo. Tampoco fue bueno el segundo, pero la obereña no se rindió y en el sexto intento consiguió su mejor marca.
Fue la primera vez que Bergallo compitió en la cita deportiva más importante del mundo y se midió ante las mejores. Sin dudas estuvo a la altura y se ganó el reconocimiento de todas sus rivales que, tras la prueba, se acercaron a felicitarla por su esfuerzo y la animaron a seguir mejorando.
Aliento obereño
A pesar de estar del otro lado del mundo, Mahira no estuvo sola. Porque en la ciudad de Oberá estuvieron muy atentos a sus presencia en Tokio. Su profesor, Jorge Flores, en diálogo con EL DEPORTIVO, manifestó su “felicidad total por haber participado de los Juegos. Ella demostró su fortaleza porque no cualquiera sale a competir y en su primer intento se cae. Encima en su sexto lanzamiento igualó su mejor marca, lo que habla a las claras que estaba muy bien preparada”.
“Estamos contento y orgullosos del trabajo que hicimos en Misiones. Ella entró y tiró contra las mejores del mundo, para nada se achicó y el deporte siempre da revancha, por eso vamos a ir por más”, agregó el profe.
Flores además percibe que “la participación de Mahira es una inyección de adrenalina para todos los chicos, porque ven ese espejo y quieren imitarla”.
Tres diplomas para Delgado
Por su parte, la ciclista Mariela Delgado finalizó la participación con un séptimo puesto en la prueba de pelotón de ruta C4-5. La misionera corrió bajo una intensa lluvia y marcó 2h31m14s y cerró su participación en Tokio 2020.
Las intenciones de la posadeña era subirse al podio en esta prueba, pero no pudo hacerlo y eso le dejó un sabor amargo. Mariela habló con DeporTV tras la competencia y manifestó que “la verdad es que las sensaciones no son buenas, he hecho durante todo el proceso todo lo necesario para llegar de la mejor manera, hicimos una muy buena preparación pero bueno en estos Juegos no se me dio”.
“Me da pena no poder darle una alegría a todos y a mi, por todo el trabajo que hice. Es momento de balance y de procesar todo esto”, finalizó la ciclista misionera, que sumó tres diplomas.