Los mismos presentaban situaciones habitacionales críticas y deficitarias, habitando construcciones que no reunían las condiciones mínimas, visibilizando factores de extrema vulnerabilidad social. A través de la gestión de la Coordinación de Tierra y Hábitat, y en el marco del programa “Regularizando mi Propiedad”, pudieron dejar atrás sus casas precarias para cumplir el sueño de la vivienda digna en el barrio El Porvenir II.
La problemática que padecían los vecinos a causa de la erosión de las tierras, producto del avance del agua del arroyo y de las intensas lluvias que causaban el desborde del mismo, hacía imperiosa la relocalización de estas familias que tenían sus viviendas comprometidas. Por lo cual, el Gabinete municipal, respondió al pedido formal de la comisión vecinal.
La Secretaría de Obras y Servicios Públicos colaboró con la mudanza de los ciudadanos. Luego, las máquinas ingresaron a trabajar en la chacra 246 para mejorar el desagüe y canalizar el afluente que afecta a los ciudadanos que viven en la zona más baja.
Luciana Scromeda, aseguró que “es un día muy importante tanto para la gestión municipal como para las tres familias que no solo recibieron su permiso de ocupación sino que también sus viviendas propias”.
Además, recordó que hace semanas se recibió la denuncia de emergencia sanitaria por parte de los vecinos que advertía sobre 27 familias que eran afectadas por las inundaciones cada vez que llovía en Posadas. “Frente a la denuncia se procedió a un estudio de la situación y se determinó que como primera medida se debía trasladar tres viviendas a los fines de realizar un drenaje y apertura de ese sector de las avenidas”, indicó la funcionaria.
“Luego de un trabajo intenso de mediación y acompañamiento, articulado con la Secretaría de Obras y Servicios Públicos y la Secretaría de Movilidad Urbana, hoy estas familias que fueron relocalizadas, comienzan a contar otra historia”, manifestó Scromeda.
La emoción de los adjudicatarios pudo percibirse en cada momento de este proceso. “Estamos felices. Nos entregaron la casa, que era algo tan ansiado y tan lejano, a la vez. Por esta felicidad agradezco al intendente Stelatto y a todas las autoridades que lo hicieron posible”, dijo Olga. “Nos cambian la vida”, agregó.
La Comuna posadeña acompaña a estas familias que además de pensar en un presente, pueden soñar con un futuro mejor, iniciando nuevos desafíos y proyectos de vida, con la tranquilidad de saber que cuentan con un techo digno.