No quedan pestañas que puedas cerrar, ni situaciones que impliquen negar, pero es importante no mezclar. Utilizar a Mercurio (mente) para discriminar dentro de lo bueno hay malo y dentro de lo malo hay bueno.
Puedes conectar con el espíritu para ir más allá de eso, todo es cuestión de perspectiva y de posiciones subjetivas. Más la maldad es maldad y la bondad bondad. Allí no hay discusiones.
El tema es cómo te relacionas con eso, muchos problemas advienen de las proyecciones que realizamos sobre las personas: parejas, padres, instituciones cómo anhelamos que nos completen y que nos mantengan adormecidos en un sueño eterno, la droga o el chupete que nos convierten en niños eternos en busca de padre/madre.
Despertar y madurar se convierte en un acto desafiante a creencias que nos mantenían en posiciones aniñadas, dependientes. Anhelando un reconocimiento que sólo llegará cuando escuches a tu corazón.
Cuando puedas reconocerte, como el yoga duele al estirar, la conciencia también siente el estirón al ampliarse a niveles de integración que desconocía. Mas lo peor que te puede pasar es creer que sabes lo que no sabes.
El conocimiento, la sabiduría y la verdad se van destilando momento a momento, son un río que baja y comunica luego sigue, tal vez después sea diferente.
Pero si deseas un buen viaje y una buena supervivencia en este mundo. Tu debes comprometerte con tu propia vida: hay que formarse, aprender, adquirir conocimiento, recordar y conectar con la esencia.
Y eso es: aprender para salir del mundo conocido, al mundo desconocido.
Aprender es viajar en ti
Aprender es observarlo todo
Aprender es saberse abierto
Aprender es dejarse atravesar
Confrontar ideas y atreverse a aceptar nuevas posibilidades y formas. Es reconocerse ignorante o mas bien abrir la mente. Abrir surcos nuevos, sembrar nuevas semillas, cosechar los legados y también lo creado. Es aceptar la falta y aliviarse por ello ir en busca de lo más sublime “dentro”, en tu interior.
Es ir de la omnipotencia a la humildad del jardín del edén al jardín con pasto o balcón de tu departamento. Ya no es potencial, es real, la vida salvaje, compleja, inmensa.
Ya no esperes ¡más! Cabalga con el viento a favor que ahora es el tiempo, el escalón que falta aparece al caminar, esa es la Fe y tú eres el amor.
Bendiciones.