El sábado culminó una nueva edición del Campeonato Panamericano de Clubes y Naciones de Patinaje Artístico, que se disputó en Guayaquil, Ecuador, y en el que dijo presente la misionera Milagros Nimeth. Fue el debut de la patinadora en la categoría Senior Internacional y finalizó en la posición 12º en un certamen que reunió a lo mejor del patín artístico de la región.
“El objetivo era quedar entre las diez primeras y estuve cerca. No me esperaba que el nivel sea tan alto”, indicó Milagros a EL DEPORTIVO.
El sábado finalizó la competencia y poco después, los patinadores argentinos se subieron al avión de regreso al país. En el ingreso hubo testeos rápidos para todos, con el objetivo de detectar casos de coronavirus de quienes llegan del extranjero. Milagros dio positivo, incluso después de haberse hecho un PCR en Ecuador dos días antes que había dado negativo. “Todavía no pude llegar a Misiones, estoy en el hotel del aeropuerto de Ezeiza, aislada”, dijo ayer a EL DEPOR.
Ahora le quedan 15 días de aislamiento por delante, aunque la buena noticia es que está atravesando la enfermedad de manera asintomática. “Acá en Ezeiza me dijeron que se nota que soy de Misiones porque, por lo general, los que son misioneros casi no presentan síntomas”, dijo Milagros sobre la experiencia.
“Tengo todo acá conmigo, porque así como bajé del avión me trajeron para el hotel. Tengo mis patines, mis trajes, todo. Quizá hasta pueda practicar algo durante estos días”, dijo entre risas.
Aislada, con tiempo para descansar, también es una buena oportunidad para hacer un balance sobre el Panamericano, que significó su debut en la categoría Senior Internacional y fue la vuelta a la competencia internacional después de más de un año por la pandemia de coronavirus.
“Fue re díficil. El objetivo era quedar entre las diez primeras y quedé 12º en total. No me esperaba que el nivel sea tan alto. Ahora tenemos que prepararnos de otra forma”, analizó Milagros en charla con EL DEPOR.
Muchas de las patinadoras de su categoría “estuvieron entrenando en Europa antes de la pandemia y cuando se cerró todo se quedaron allá. Estuvieron entrenando con los mejores del mundo y eso se notó. El nivel fue altísimo”, señaló Mily.
“Yo pude dar todo, podría haber sido mejor, pero di todo y me encantó volver a la pista”, agregó sobre lo que fue su regreso a la competencia internacional.
En cuanto a cómo fue patinar en tiempos de pandemia, indicó que por protocolo “los patinadores entrábamos en calor, competíamos, juntábamos nuestras cosas y nos teníamos que ir, no podíamos ver la categoría. En el estadio estaban el técnico y el que competía, nadie más. Todos estábamos encerrados en el hotel y no podíamos tener contacto con otra persona”; mientras que antes de la pandemia “estábamos todo el día en el estadio, cuando una iba a competir todo el equipo la acompañaba, el último día hacíamos una despedida. Fue diferente”.
Los hisoparon en cinco oportunidades. “Dos antes de ir a Ecuador, allá dos más y uno más para la entrada al país. Ese último PCR, que me hice dos días antes de volver, dio negativo pero el testeo rápido que me hicieron cuando entré a Argentina dio positivo. Me volvieron a hacer el PCR pero no me dieron el resultado, pero como sigo acá (en el hotel) supongo que fue positivo”, remarcó entre risas.
Una vez que pase los días de aislamiento y Mily pueda regresar a Misiones deberá retomar los entrenamientos y reencontrarse con Viviana Kruger y Alejandro Raga, sus entrenadores, quienes no pudieron estar con ella en Guayaquil, pero vieron la competencia por streaming.
“Por suerte, y también lastimosamente, mis técnicos lo vieron desde afuera. Si iban a Ecuador iban a estar más concentrados en mí y no tanto en la categoría, así que ellos lo vieron desde afuera y ahora podemos mejorar otros aspectos. De ahí en más veremos si apuntamos a los Juegos Sudamericanos de San Juan o directamente al Nacional y a los objetivos del año que viene”, indicó Mily.
Vale recordar que el Sudamericano tiene fecha para agosto próximo, pero también está en veremos por la situación sanitaria. “Ahora tengo más herramientas y otros objetivos para mejorar. Capaz en uno o dos años podamos llegar al Mundial si trabajamos a full” cerró Milagros.