Mediante la iniciativa solidaria “Un pacto con la Selva, 1000 árboles”, que impulsa “Cacho” Báez y el grupo jeepero “Jabalí Off Road” se pretende reforestar las zonas afectadas por los incendios forestales en el Valle del Cuña Pirú.
Con palas al hombro, plantines y la ayuda de más de 60 vecinos ayer se cumplió la primera jornada y según contó Báez, se realizó un trabajo satisfactorio.
“Se trata de un proyecto que se gestó mientras caminábamos sobre los restos de cenizas y brasas que nos dejaron los últimos incendios en el Valle del Cuña Pirú. En aquel entonces mirábamos con tristeza los alrededores y el estado en que había quedado después del fuego”, explicó Báez en diálogo con “El Aire de las Misiones” (FM 89.3).
La tarea se realizó en conjunto con vecinos, ambientalistas de la zona, bomberos voluntarios, de la Policía, organismos privados y funcionarios públicos.
“Decidimos volver a entrar a la zona donde había ocurrido el desastre y hacer algo por el monte. Sinceramente fue algo muy doloroso estar ahí y ser testigos de todo ese desastre”, contó el hombre sobre las motivaciones de comenzar con el plan de forestación.
Previamente se trabajó con una máquina topadora para remover la tierra y los restos de troncos.
“En la zona incendiada, los brigadistas habían colocado cortafuegos, es decir que se tuvieron que tumbar ejemplares de árboles de grandes dimensiones para apagar el incendio”, señaló el activista solidario.
“Visualizar esas especies nos permitió tener un panorama de lo que había en el lugar como para volver a plantarlas ahora. Es una zona rocosa con muchos frutales, pitangas, cerezas, lapachos y eso fue lo que llevamos ayer”.
En general se trató de plantines de pequeño porte.
Participantes
Por tratarse de una iniciativa solidaria se sumó un grupo importante de vecinos.
“Fue tanta la gente que se acercó a nosotros que hasta hubo que dividir en grupos para una segunda plantación. En esta ocasión contamos con 60 personas con quienes entramos al monte. Realmente es de destacar el compromiso de todos”, resaltó Báez.
No fue una jornada sencilla, ya para ingresar hasta el lugar hubo que hacer varios kilómetros de ruta y luego meterse monte adentro para ponerse a plantar.
Se espera que las condiciones meteorológicas favorables ayuden a la recuperación plena del monte.