Un caso de abuso sexual dentro de una comisaría en el que un preso fue sometido por otros dos detenidos terminó con condena para los acusados.
Con diferente grado de participación, ambos reconocieron ser los autores del hecho y evitaron el juicio oral en un proceso abreviado.
Probablemente por tratarse de un delito reñido con la privacidad de la víctima y por haber ocurrido en un lugar custodiado, el caso no trascendió a los medios de comunicación sino hasta que llegó a la instancia previa de debate en el Tribunal Penal 1 de Oberá.
Los acusados de cometer el abuso sexual eran un dúo que poseía un frondoso prontuario y se encontraban alojados en la seccional Primera de San Pedro.
El hecho fue descubierto el 9 de diciembre de 2018 en una celda de esa dependencia. Para preservar la identidad de la víctima, se reservan sus datos filiatorios.
Los autores del hecho, identificados como Maximiliano Abel Márquez (22) y Héctor Julián Amarilla (34), fueron descubiertos por los agentes de la seccional cuando sometían al otro preso. En una de las revisiones rutinarias de rigor en el sector de los detenidos, los efectivos observaron a la víctima practicándole sexo oral a uno de los sospechosos.
La gravedad de la situación hizo que preservaran al detenido sacándolo de ese lugar y que el caso fuera denunciado por la fuerza ante la Justicia.
A medida que trascurrió la investigación y la persona abusada brindara su testimonio en la causa, se pudo saber que tanto Márquez como Amarilla lo sometían sexualmente. Este último era el que incitaba a Márquez para que se aprovechara sexualmente del otro interno.
Todo el tiempo estuvo amenazado por sus compañeros de celda. En las noches cuando intentaba dormir, era accedido carnalmente.
Los acusados eran viejos conocidos de la policía y con el correr de los años habían acumulado en su prontuario delitos menores de todo tipo. Robo de mercaderías de un supermercado, sustracción de elementos del interior de automóviles, la sustracción de un acordeón a un vecino de la zona, hurto de prendas de vestir de un negocio, además de causas por lesiones al estar involucrados en peleas.
El expediente por el caso de abuso fue elevado a juicio y llegó al Tribunal de Oberá. La fiscalía ofreció a la defensa de los acusados abreviar el proceso y evitar que se sentaran en el banquillo.
Ellos reconocieron haber sido los que cometieron los hechos y solicitaron un juicio abreviado. El acuerdo entre las partes significó que Maximiliano Márquez debía ser condenado a una pena de 13 años por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal y amenazas”, mientras que Héctor Amarilla iba ser condenado a ocho años por “abuso sexual con acceso carnal, instigación a cometer delitos y amenazas”.
El acuerdo fue presentado ante los magistrados del Tribunal obereño y en los últimos días de diciembre pasado, luego de sopesar los delitos y las penas, prestaron conformidad, clausurándose así el juicio abreviado.
Prontuario
Ambos eran viejos conocidos por sus andanzas y ya habían sido acusados de cometer ilícitos menores de diferente tipo como ser: robo de mercaderías, sustracción de elementos de automóviles, hurto de prendas, entre otros.