El fin es reducir el número de pacientes con quemaduras por pirotecnias en Misiones. En últimas fiestas se registraron siete heridos por juegos artificiales, todos menores.
En estas fechas es tradición quemar fuegos artificiales o juegos pirotécnicos. Sin embargo, el uso incorrecto de éstos, puede ocasionar lesiones con secuelas permanentes. Más de la mitad de las lesiones por cohetes afectan las manos o brazos, el resto en el abdomen, tórax, cara, genitales y piernas.
El ministro de Salud Pública, Oscar Alarcón, y el responsable del Servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva del Parque de la Salud, Gustavo Abrile, lanzaron ayer esta campaña junto al asesor del Ministerio de Salud de la Nación, Andrés Leibovich; el director de Atención Primaria, Leopoldo Benítez y el neurocirujano e integrante de la Dirección de APS, Mario Barrera.
“Como ocurre hace 11 años, iniciamos esta campaña con un fuerte compromiso, pero no solamente en la prevención, sino también para fortalecer el trabajo que se viene realizando en Misiones para evitar lesiones por quemaduras, y en este caso de lesiones que se producen por la manipulación de juegos pirotécnicos que en su mayoría no están autorizados para su uso. Nosotros abogamos a que no se usen productos pirotécnicos, pero basados en las estadísticas que tenemos con respeto a los accidentes, en época de fiestas, es que llamamos a la población a ser responsable y prudente en el uso de pirotecnia tanto por el daño físico que puede causar a la persona por el mal uso de los cohetes como para proteger a personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) u otra patología neurológica y a los animales”, remarcó Alarcón.
En estos años de campaña las estadísticas por quemaduras por fuegos artificiales o pirotecnia disminuyeron, “si comparamos las últimas cinco campañas notamos el descenso de los casos, de igual manera hay que seguir trabajando fuertemente, sobre todo para evitar secuelas en niños”.
“La particularidad del año pasado es que los pacientes fueron todos pediátricos y estos casos no se pueden catalogar como accidentes porque pueden ser prevenibles”, argumentó Gustavo Abrile.