En el ámbito deportivo, la pandemia de coronavirus cortó proyectos y derribó ilusiones. Hasta los Juegos Olímpicos debieron postergarse. La meta de 2020 se transformó en levantarse y seguir adelante. Brisa Rotta (18) lo sabe y, en ese camino, en los próximos días participará virtualmente del Campeonato Sudamericano de levantamiento de pesas. Contra viento y marea, sólo queda remarla.
La obereña tuvo un 2019 excelente, que coronó con la estatuilla de levantamiento y una beca en la Fiesta del Deporte de PRIMERA EDICIÓN. Y el 2020 pintaba aún mejor: en febrero se mudó al CeNARD, en Buenos Aires, como una de las proyecciones del deporte nacional.
En aquel momento, nadie podía imaginar lo que sucedería en marzo. El coronavirus llegó para quedarse, todo se suspendió y Brisa, como tantos otros atletas, debió volver a casa.
De aquello pasaron diez meses y Rotta no da el brazo a torcer. Desde el sábado 12 de diciembre participará de manera virtual del Campeonato Sudamericano organizado por Colombia. Todo pese a que, por normativa, no podrá oficializar su marca. Será una manera feliz de ponerle el moño al 2020 y dar vuelta la página de cara a lo que se viene en 2021.
“Los únicos discos y barras homologados para la competencia están en Buenos Aires, en el CeNARD. Y por una cuestión de tiempos y de protocolo, no voy a poder viajar hasta allá para competir”, se lamentó Brisa quien, no obstante, marcará presencia desde el gimnasio obereño Akclis. Lo importante, a fin de cuentas, es competir.
“Por ejemplo, la barra que tengo acá no es homologada, pero tiene la medida y el agarre correcto. Mantengo la esperanza de participar. Obviamente cuesta un poco motivarse con todo esto, creo que a todos los deportistas nos complicó la pandemia, porque no es lo mismo estar en un panamericano y sentir la presión que hacerlo vía Zoom”, argumentó la obereña.
Tras sorprender desde Misiones al país con una marca de 155 kilogramos (68 de arranque y 87 de envión), Brisa fue convocada a la Selección Argentina Sub-17 y participó del Sudamericano 2019 de la categoría en Buenos Aires, donde fue quinta. Ese registro le permitió recibir ahora la invitación para el Panamericano Sub-20.
Pese al parate, Rotta no dejó nunca de entrenar y hoy se acerca al récord de los 167 kilogramos. “Seguí entrenando en casa y en el gimnasio, me cuido con la nutrición y el descanso. Si bien no voy a poder homologar la marca, va a ser positivo poder cerrar el año así, además de que el registro quedará en mi historial”, explicó la atleta juvenil.
Lo ya dicho, el Panamericano será una buena manera de despedir el 2020. Al mal tiempo, buena cara. Y después, a pensar en la temporada venidera.
“La idea es volver a Buenos Aires y seguir en la Selección Argentina. Me estaba yendo rebien hasta que pasó todo esto, así que espero poder recuperar el terreno perdido, sobre todo porque tenemos entendido que la beca va a seguir. Además, de una u otra manera voy a seguir mis estudios en Buenos Aires”, sostuvo Brisa, quien lejos está de bajar los brazos: por delante tiene mucho peso por levantar.