Sin lugar a dudas se nos fue el año y si hicieras un balance, ¿qué color le pondrías a este raro, loco, inusual y lleno de oportunidades año 2020?, que nos invitó a reencontrarnos, nos hizo que tuviéramos la mirada en lo que realmente importa: la familia, los amigos, de repente valoramos el compartir, nos faltó por momentos el abrazo, por momentos nos sentimos prisioneros y entendimos la importancia de la palabra libertad.
Este año se puso de moda el barbijo y de repente la mitad de la cara tenía colores, la higiene, el uso del alcohol y el jabón pasaron a ser los protagonistas en este 2020, pero más allá de todo esto nos sirvió para volvernos más humanos, más empáticos, en definitiva nos llevó a sentir más.
Así que te vuelvo a preguntar, ¿qué color tuvo este año para vos? Para mi comenzó mostrando lo negativo del rojo, todos teníamos miedo, por momentos nos paralizamos, nos ganó la ansiedad y todo lo que habíamos planeado para este año ya no existía.
Después tuvimos que reinventarnos y el naranja comenzó a hacer de las suyas, nos volvimos creativos, muchos encontramos la forma de seguir con nuestras vidas y se me viene a la cabeza es frase: “toda crisis es sinónimo de oportunidad”.
En cuestiones personales el rosa y el verde jugaron al amor sin importar el vínculo, intentamos más que nunca de conectarnos con nuestros seres queridos, así que el amor también fue bastante protagonista. Ya queda muy poco del 2020, pensaste ¿cómo lo vas a terminar?
Este año por un lado me dejó dos palabras que las sigo trabajando: aceptar y fluir. Y aprendí más que nunca que no tenemos el control de absolutamente nada, así que no me quedó otra que vivirlo sin hacer planes, vivir el momento, el aquí y ahora.
Y la verdad es que sabiendo y entendiendo que lo único que tengo es este momento disfruté mucho más de todo. Desde mi perspectiva, este fue un año valioso en todas las áreas de mi vida y el violeta me invitó a disfrutar de los cambios, aprendí un poco a transformar mis pensamientos negativos en positivos, dejé algunas veces que vida me sorprenda, lo disfruté al máximo y fui feliz.
Te invito a que le des una última mirada a este año, disfrutes cada minuto de lo que queda y que no se te olvide la palabra ¡Gracias!