El Gobierno de Misiones realizó el traspaso formal de la administración integral del hogar de niños y adolescentes Padre Antonio Sepp de Parada Leis, que a partir de este martes pasó a la órbita del Ministerio de Desarrollo Social, la Mujer y la Juventud. La entidad, que alberga a doce menores, estuvo bajo la tutela de una asociación civil durante los últimos 20 años.
La ministra, Benilda Dammer, destacó el trabajo realizado por la comisión directiva del hogar y agradeció tantos años de dedicación. “Es maravilloso el esfuerzo que realizaron durante veinte años en la contención de niños y adolescentes. Están todos escolarizados y debemos velar por las necesidades que puedan llegar a tener”, sostuvo.
Agregó que actualmente llevan adelante una tarea en conjunto con la justicia y la Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes para analizar la situación de cada caso e indagar si es necesaria la revinculación con las familias. También se estudia el estado de adoptabilidad de algunos menores para que puedan tener una familia.
“Incorporaremos un equipo multidisciplinar con psicólogos, trabajadores sociales, docentes para talleres, un vehículo con chofer para llevar a los niños a los turnos médicos o las actividades y personal de limpieza”, remarcó Dammer. Por otra parte, manifestó que también se harán cargo del personal que actualmente está vinculado a la entidad.
Corina Guimaraes, quien presidió la comisión directiva a cargo del hogar hasta el momento de su traspaso, agradeció a la ministra la asistencia. “El ministerio seguro logrará un montón de objetivos que nosotros no pudimos lograr, debido a los recursos limitados que tenemos”, señaló. Por otra parte, aseguró que extrañará estar al frente del hogar, después de 20 años de trabajo. “Son sentimientos encontrados, pero seguiré viniendo para acompañarlos, ellos saben el cariño que les tenemos”, expresó.
La entidad fue fundada en 1984, por Jorge Fedorischak, en las instalaciones de una antigua escuela. “Acá funciona una familia, el objetivo más grande para ellos es la escolaridad. Además tienen tareas asignadas del hogar, la huerta, un gallinero y un espacio para la recreación y hacer deportes”, indicó Corina. En el predio funciona una escuela primaria donde asiste uno de los niños, mientras que los más grandes asisten al Instituto de Enseñanza Agropecuaria (IEA) del barrio Santa Inés de Garupá.