“Estos números no representan de forma precisa lo que está pasando en nuestra comunidad”, dijo Nancy Messonnier, directiva de los gubernamentales Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), según la agencia EFE.
La funcionaria no desestimó que aparezcan nuevos casos entre algunos de los casi 330 estadounidenses que fueron evacuados del crucero anclado en el puerto japonés de Yokohama y que aterrizaron esta semana en dos bases aéreas en California y Texas.
Messonnier explicó que a partir de hoy realizarán cambios en la forma como se clasifican los casos y dividirán a las personas diagnosticadas en territorio estadounidense, que hasta el momento suman 13, de aquellos que fueron identificados en el exterior, como los 18 del crucero Diamond Princess y otros tres estadounidenses diagnosticados y repatriados desde la provincia china de Wuhan, epicentro de esta epidemia.
Por su parte, Ian Brownlee, del Departamento de Estado, instó a seguir las recomendaciones establecidas para los viajeros, incluidos a aquellos que lo hagan en cruceros: “Esta es una situación dinámica y los estadounidenses viajando por crucero pueden estar sujetos a cuarentenas”.
Messonnier dijo que el objetivo principal es frenar la introducción del virus COVID-19 a Estados Unidos y evitar “una propagación sostenida”, para lo cual trabajan en coordinación con las agencias sanitarias estatales y revisan todos sus protocolos para casos de pandemia.
“No estamos viendo la propagación aquí en Estados Unidos, todavía, pero es muy posible, incluso probable, que eventualmente suceda”, adelantó Messonnier.
Fuente: Agencia de Noticias Télam
