Los usuarios del transporte integrado en la ciudad vuelven a ser rehenes del Grupo Z, la empresa concesionaria del servicio en Posadas, Garupá y Candelaria. El calor del denso verano y el malhumor por las largas esperas en las Estaciones de Transferencia, fueron protagonistas durante los últimos días.
Aunque el Grupo Z lo negó en sus redes sociales, los pasajeros frecuentes aseguraron ver reducidas las frecuencias desde el pasado 28 de diciembre. Esto representa un perjuicio, teniendo en cuenta que no todos se toman vacaciones ni entran en feria como el Estado.
El poderoso grupo desmintió una publicación que se viralizó, atribuida a de la App Moovit, donde se “oficializaba” un recorte en 51 servicios hasta el 2 de marzo. Lo curioso es que un funcionario municipal admitió que la empresa les adelantó que bajaban “refuerzos” durante las vacaciones.
Paralelamente al anuncio sobre el “congelamiento” de las tarifas, por parte del Gobierno provincial, en sintonía con la decisión nacional de no autorizar nuevas subas por los siguientes 180 días, decenas de pasajeros de Posadas expresaron haber experimentado demoras en las frecuencias.
Aún con el freno a otro posible “boletazo”, se mantienen los subsidios que la Nación en menor medida, la Provincia en mayor proporción y la Comuna posadeña pagan al Grupo Z para sostener las prestaciones.
No es la primera vez que el “pulpo empresario” toma determinaciones unilaterales, inconsultas, en perjuicio de los pasajeros que dependen de su pésimo y deficiente servicio para poder trasladarse en el área metropolitana.
Aunque públicamente no lo dicen, en la práctica no llega a ofrecerse el servicio que se promete a las autoridades. Las fotografías de los últimos días en las Transferencias, muestran que la gente se agolpa en las plataformas cuando ya no hay servicio escolar y varias dependencias públicas comenzaron su feria administrativa.
Malestar
“Por supuesto que harán lo que se les antoje ya que no hay una política pública seria al respecto. Desde el vamos violan las leyes como la ley contra los monopolios, y la culpa es del chancho o de quien le da de comer”, sentenció José Luty un usuario del servicio a PRIMERA EDICIÓN sobre la reducción aplicada y no admitida.
En consonancia el vecino José Rojas dijo que “siempre hacen lo que quieren”. Alicia Inés López comentó que “con este calor no hay derecho”.
“Hay muchas personas que viajan como ganado. Dónde están los responsables de aplicar sanciones”, apuntó.
El control municipal
Este Diario intentó obtener un informe oficial que el Grupo Z haya entregado a las autoridades municipales recién asumidas. El secretario de Movilidad Urbana de la Comuna posadeña, Lucas Jardín, manifestó no estar en la provincia.
Sin embargo, vía WhatsApp, recordó brevemente que el viernes pasado mantuvieron una reunión con el consorcio del SITUM, durante la cual el Grupo Z sólo informó que “hasta el 2 de marzo no hay refuerzos por el receso”.
“Es lo único que estaba seguro, la empresa no nos dio un informe detallado todavía de la reducción”, sentenció Jardín para derivar el tema en un director de su área que no respondió los llamados.
A nivel municipal, hay un marco normativo vigente que no autoriza la disminución de frecuencias sin previo consentimiento de la autoridad y, en caso de detectarse incumplimientos, podrían labrarse actas de infracción. Desde la Comisión de Transporte del Concejo Deliberante de Posadas expusieron que están “trabajando en el problema” pero tampoco dieron precisiones.