El automovilista desaceleró la marcha y notó algo extraño en el sujeto que caminaba descalzo por la banquina de la ruta nacional 12. Llamó a la Policía y cuando los efectivos abordaron al extraño caminante nocturno y le preguntaron su nombre, éste les contestó con suma frialdad que se llamaba “Roberto”.
No obstante, los efectivos notaron que tenía una cicatriz profunda en la sien derecha. Una marca indeleble, una seña particular que figuraba en el pedido de captura de uno de los hombres más buscados por esas horas en la provincia: Hilario Dos Santos (32).
La secuencia se registró este jueves a las 3.30 en Eldorado, más precisamente sobre la mencionada carretera nacional, a la altura del puente del arroyo Piray Guazú.
La captura estuvo a cargo del oficial subayudante Maximiliano Díaz y el Sargento Luis Pastori. Eran dos de los más de 250 efectivos a cargo de la búsqueda del preso que se escapó el pasado miércoles a las 7 del citado complejo penitenciario, situado sobre avenida El Fundador de Eldorado.
El reo aprovechó que a esa hora se realizaba fajina (limpieza) y salió a sacar la basura, pero jamás regresó.
Hilario es célebre en la UP III porque se había fugado en 2015 durante una salida transitoria y luego de tres años prófugo lo capturó Prefectura Naval. Eso fue a finales de diciembre pasado. Apenas dos meses después volvió a evadirse.
Debía purgar nueve años de prisión por un asalto cometido en Jardín América en 2008, donde baleó en la cabeza a un hombre y no lo mató por fortuna. Dos años después fue condenado tras admitir su culpa en un juicio abreviado.
Ahora se encuentra con custodia permanente en una celda de la comisaría Tercera y a disposición de la Justicia. Sumará una nueva causa y en carácter de reincidente por evasión y seguramente le espera otra larga estadía tras las rejas.