
El Instituto Provincial de Desarrollo Habitacional (IPRODHA) tomó la decisión de cerrar siete viviendas del Barrio Samaritano de San Vicente al constatar que sus adjudicatarios no se encontraban habitándolas.
Estos hogares fueron entregados a sus beneficiarios los primeros días del mes de diciembre y tenían el plazo de quince días para habitarla. Sin embargo, como no lo hicieron los funcionarios del organismo pusieron una faja en sus puertas para que nadie ingrese a las casas y planean convocar a sus adjudicatarios. En el caso de que confirmarles que no van a usar estas viviendas, serán adjudicaran a nuevas familias.
La inspección al barrio
El jueves por la mañana una delegación de funcionarios del IPRODHA llegó hasta San Vicente con el objetivo de hacer una inspección al barrio Samaritano y se encontró con que había siete casas que nunca llegaron a ser habitadas. Además, se encontraron con que los adjudicatarios tampoco habían hecho los trámites para poner la luz eléctrica y el agua potable.
Ante esta situación, los inspectores del organismo habitacional decidieron clausurar las puertas delanteras y traseras para que nadie pueda ingresar sin una nueva autorización correspondiente. En el carte de advertencia puede leerse: “Vivienda en infracción habitacional. Proceso judicial en ejecución. Su ocupación será objeto de inmediata denuncia penal. Evite problemas judiciales”.
Estas viviendas fueron entregadas durante la primera semana de diciembre a sus cien adjudicatarios. Los nuevos vecinos del Barrio Samaritano tenían quince días para hacer los trámites para bajar la electricidad y poner el agua potable. Este es un barrio social y estos dos servicios no tenían costos para ellos. Pero ya pasó mas de un mes de ese plazo y siete adjudicatarios no hicieron los tramites, ni tampoco la habitaron.

Desde el ente provincial decidieron cerrar la casa para que no entre nadie y van a tratar de ubicar a los adjudicatarios para ver qué pasó y porqué no entraron a sus nuevas viviendas. La semana que viene van a volver los inspectores y de no aparecer los adjudicatarios originales, van a designar a nuevas familias.
El barrio Samaritano esta ubicado a unos tres mil quinientos metros de la ruta Nacional 14 y de la terminal de ómnibus local. Fueron reubicados en el lugar familias que vivían en el conocido barrio “Villa Tripa”. Un conjunto de unas setenta viviendas ubicadas al costado de la ruta nacional después del acceso norte de la ciudad Capital de la Madera. Otros adjudicatarios fueron familias humildes que no tenían casas o que los lugares donde vivían eran muy malos o inhabitables.
Según fuentes oficiales el cierre de las viviendas se dio porque no fueron habitadas y para evitar que otra gente entre sin estar en la lista de espera. No hay una fuente oficial que haya confirmado que sea porque los adjudicatarios intentaban vender las viviendas antes de ir a ocuparlos.