El miedo es una gracia no una desgracia

Quizás el mayor desafío personal nos llegue cuando le demos un lugar al sufrimiento    en nuestras vidas. Su aparición es una gracia… no una desgracia. Poder interpretarlo, vivirlo y asumirlo es poder trascenderlo…. Esto comienza cuando decimos  ´´sí a todo lo que nos toca´´.Pero muchas veces por miedo al cambio sostenemos lo que nos toca vivir desde la rebeldía o desde el victimismo. Lo sostenemos y lo padecemos y así quedamos atrapados sin poder vivir el presente. Nos apartamos de la vida. Para Sostener algo debemos dividir nuestra conciencia, nuestra energía. Esto lo hacemos, por miedo al cambio, por miedo a no encajar, por miedo a ser excluido, por miedo a perder la pertenencia… Por miedo sostengo una forma de ser heredada y me privo de encontrar “mi forma de ser”, “mi lugar en la vida”.¡Hasta cuándo! ¿Cuánto tiempo se puede vivir dividido siendo algo para afuera y sintiendo algo diferente por dentro?Soltar el victimismo es poder hacerse cargo de la propia vida. Soltar la rebeldía es recuperar el poder de nuestra evolución.Cada uno de nosotros puede desde el adulto elegir qué tipo de vida quiere vivir y asumir los riesgos del cambio. Dejar de manipular, arriesgarse a perder la pseudo seguridad y el confort a costa de vivir fragmentados.“Lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma” – Carl Gustav Jung.La aceptación tiene el poder de transmutarlo todo, cuanto más espacio le demos en nuestra vida cotidiana, más cerca estaremos de estar en paz con nosotros mismos  y más conectaremos con la capacidad de crear nuestra vida, tal y como la deseamos.ColaboraPatricia [email protected] Facebook: Patricia Mónica Couceiro 3764 829015