“Con este pararrayo queremos prevenir la caída de estos rayos a través de la utilización de una serie de jabalinas conectadas a un cable de acero cobreado que va a conducir la energía desde el punto más alto del pararrayo hacia la jabalina enterrada bajo tierra para que se disperse la energía”, explicaron los jóvenes. Señalaron que cualquier persona puede hacerlo en su casa y se preocuparon por asegurar un presupuesto accesible para el bolsillo familiar. “Buscamos un bajo presupuesto para demostrar que existen medidas no convencionales para los riesgos que provocan las tormentas eléctricas que cada vez son mayores”. Todos los materiales necesarios rondan los 600 pesos. “Buscamos concientizar a la población de los riesgos y demostrar que a través de un bajo presupuesto se puede proteger de manera efectiva ante la caída de un rayo”, indicaron. Para cerrar, los estudiantes aseguraron que toda su comunidad se está integrando al proyecto que elaboraron. “Les interesó porque ayuda muchísimo y todos tienen esta problemática”.
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