Nos podemos sentir mejor

Con seguridad sabemos hoy más que nunca que los días en el trabajo y demás obligaciones, muchas veces nos envejecen en forma prematura. El cansancio y mal humor que muchas veces nos acompañan se deben a que llenamos nuestro sistema de toxinas, ya sea internas o externas. Esto significa que al vivir en una ciudad gozamos de muchas comodidades que nos da el avance tecnológico, pero a su vez genera toxinas que ingerimos con el agua, la comida, el aire que respiramos. Todas nuestras emociones a su vez afectan la composición celular en positivo o negativo, pero disfrutamos de la calidad y bienestar que los avances tecnológicos nos dan, así que veamos positivamente qué podemos hacer para disfrutar sin perjudicarnos tanto.En primer lugar establecemos que la salud es el bienestar físico y mental: paso número uno a tener en cuenta, conocer cómo nos encontramos, para eso es fundamental el chequeo clínico en el que además de pedir análisis evaluamos con preguntas sobre alimentación, descanso, recreación, trabajo. Podemos fijar un plan que consistirá en armarlo a corto, mediano y largo plazo, sin metas claras, así será más difícil; de ahí la importancia de organizarnos, ordenar prioridades para que lo que hagamos perdure.Si nunca hicimos actividad física ni desayunamos correctamente será difícil hacer el cambio drástico, pero podemos comenzar con algo de elongación de cada uno de nuestros músculos y ejercitar la buena respiración, en periodos de 15minutos, de tres a cuatro veces al día. En la semana caminaremos o haremos pileta, para luego ascender en nuestra escala de exigencias. Si siempre comemos pastas y carnes rojas, primero incorporaremos verduras con pastas y luego sacaremos de a poco el exceso de pastas. Así todo lo lograremos con más facilidad y sobre todo con constancia, que nos llevará al verdadero cambio.Incorporar desintoxicantes naturales es genial para ir preparándonos y nutriéndonos. Podemos acompañar con tratamientos de disintoxicación endovenosa como quelación y nutrirlos con desintoxicadores endovenosos como magnesio, zinc, vitamina c, aminoácidos para  finalizar con el broche de oro: la vacuna antienvejecimiento.Las vacunas no son todas iguales, hay varios tipos según cada persona. Algunas tienen riqueza de minerales y vitaminas; y otras tienen incorporados aminoácidos o complejos estimulantes hormonales. No duden en consultarme. ColaboraMarcela CampiasMédica. Clínica.Especialista en Medicina Orthomolecular. CIMOEn FacebookAv. Tambor de Tacuarí 33283764- 413607