Como cada año, los peregrinos arribaron desde distintos puntos de la región hasta el kilómetro 776 de la ruta nacional 14 para venerar y conmemorar a Santa Catalina de Alejandría. Desde las primeras horas del domingo, el recorrido hasta el santuario fue acompañado por caminantes, ciclistas, motociclistas y automóviles. Pero, principalmente los devotos a caballo, vestidos con ropas típicas fueron una de las postales a lo largo de la arteria. “Todos los años venimos a pedirle a la virgencita por la familia y le agradecemos por las bendiciones dadas”, contó Juan José, uno de los 40 jinetes de la agrupación tradicional San José.Cerca de las 7 llegaron los primeros peregrinos, quienes se instalaron junto a familiares y amigos en el gran santuario para dar inicio a una jornada de festejo popular.Para las 9.30 se realizó la santa misa a cargo del obispo Hugo Santiago, cuyas oraciones fueron acompañadas por cantos y alabanzas. Ya en horas del mediodía, más de 30 mil personas se encontraban en el predio. Este año, los preparativos para la conmemoración contó con innumerables donaciones. Especialmente, las destinadas al asado comunitario.“Iniciamos el 17 de noviembre con la tradicional novena”, explicó la organizadora del encuentro, Graciela Larraburu. Y siguió “éste año tuvimos al menos 50 cabezas de ganado, todas donaciones. Y durante el día la gente colaboró con alimentos, ropas y juguetes que serán destinados al paraje Santa Rosa donde más de 50 familias reciben lo recaudado. El año pasado todos tuvieron ropas, pan dulce y juguetes. Para ellos es importante porque en esa época del año no hay corte de yerba y la mayoría no tiene otro trabajo”.La fiesta, además del asado comunitario, atrae concurrentes vestidos con atuendos típicos para el gran baile que se realiza en torno al escenario Adelio Suárez. Allí, numerosos grupos chamameseros le ponen música a la sobremesa y colorean de chamamé la danza de los devotos. Entre los más de 40 artistas que se presentaron en la celebración se destacaron; Julián Zini, Susana Moreno, Los vecinos, Ramón Mendez, La gringa del chamamé, Los hermanos Núñez, Carolina Tabarez, Moni Encina, Vanesa Avellaneda, Nerina y Alfredo, Los hermanos Rodríguez, entre otros. “Los músicos vienen a la fiesta y lo hacen de corazón, sin cobrar nada. Y estamos eternamente agradecidos a ellos y a cada colaborador”, aseguró Larraburu.Para la familia El encuentro convocó a fieles que llegaron desde Posadas, Iguazú, Eldorado, Jardín América, San José, Apóstoles y otras tantas localidades misioneras; así como también a estancieros de San Carlos, Santo Tomé, Ituzaingó. Incluso, visitantes de Buenos Aires, Chaco y Formosa.Como Erminda Montero, quien desde hace cuatro años llega desde Apóstoles para agradecer a la Santa. “Por la salud y la familia. Nosotros llegamos el sábado y nos instalamos en una carpa, también trajimos nuestra producción casera de pickles y nuestros productos hechos con elementos que nos da el monte, sólo usamos barniz para darle un toque. Aquí disfruto en familia y conozco muchas personas en cada encuentro”. Natalia en cambio, es la primera vez que participa de la celebración. Llegó desde Ituzaingó, Corrientes junto a su esposo. “Somos devotos y nos sorprendió la cantidad de personas que comparten la fe, estamos muy emocionados”. Más de 50 niños bautizados Desde las 8.30 se realizaron los bautizos, se estima que más de 50 pequeños recibieron la bendición. Sandra, una joven madre llegó junto a su pequeña niña Anabel, de tres meses. “Hace unos meses hice la promesa por mi trabajo y mi familia. Hoy (por ayer) cumplo bautizando a mi nena”. Teresa Welter, oriunda de Posadas contó que es la primera vez “que venimos a pasar el día, somos devotos de la Santa y venimos a pedir que el año que viene haya paz y trabajo en nuestro país”. Hace 84 añosLa fiesta de Santa Catalina se inició hace 84 años en Paraje Santos Lugares, a unos nueve kilómetros del predio donde hoy se realiza.“Al principio eran pequeñas fiestas que convocaba a unas 300 personas. El impulsor de la celebración fue Luis Cámara, quien falleció en 1991” detalló Larraburu. A mediados de los ’70, la imagen de la Santa fue trasladada al predio actual y se cambió el nombre del paraje por Santa Catalina. “Cuando Cámara compró el paraje Vichadero le cambió el nombre, introduce la imagen de la Santa y hace el oratorio”. En ese lugar se construye un altar con azulejos traídos del Vaticano, donde se lee la leyenda: “Santa Catalina bendícenos”. Tras la muerte de Cámara la fiesta fue suspendida por años. Pero, en los ‘90 y por la labor de Larraburu, se reiniciaron los festejos. Poco después, y luego de inaugurarse la capilla se realizan las celebraciones en el marco de las fiestas patronales en honor a Santa Catalina en la estancia que lleva su nombre y que pertenece a la devota Graciela Larraburu.
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