La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS) oficializó los nuevos valores de jubilaciones y pensiones que regirán a partir de enero de 2026, tras aplicar una suba del 2,47% correspondiente a la movilidad mensual atada a la inflación.
Según lo dispuesto en la Resolución 381/2025, el haber mínimo garantizado pasará a ser de $349.299,32, mientras que la jubilación máxima quedará establecida en $2.350.453,70. Ambos montos comenzarán a percibirse con los haberes del primer mes del año.
En el mismo esquema de actualización, la ANSeS fijó el nuevo valor de la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), que desde enero será de $279.439,46, beneficio destinado a personas mayores que no reúnen los aportes necesarios para acceder a una jubilación ordinaria. Asimismo, la Prestación Básica Universal (PBU) se actualizó a $159.788,50, uno de los componentes centrales del haber previsional.
Tal como se informó previamente, el Gobierno nacional también resolvió dar continuidad al bono previsional, que se liquidará junto con los haberes de enero como refuerzo adicional para jubilados y pensionados que perciben los ingresos más bajos. De este modo, sumando el haber mínimo y el bono previsional, el ingreso mínimo será de $ 419.299,32.
La suba responde a la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente a noviembre de 2025, en el marco del mecanismo de movilidad mensual vigente. En paralelo, la resolución estableció las nuevas bases imponibles para el cálculo de aportes previsionales, con una base mínima de $117.643,93 y una base máxima de $3.823.372,95, parámetros que inciden tanto en los descuentos salariales como en los futuros haberes.
Con estas definiciones, la ANSES dejó establecidos los ingresos previsionales con los que jubilados y pensionados iniciarán 2026, en un contexto económico que mantiene abierto el debate sobre la suficiencia de los haberes frente al costo de vida.





