Durante la madrugada del miércoles, tres incendios movilizaron a las dotaciones de Bomberos de las Unidades Regionales II, VIII y IX, junto a cuerpos voluntarios, en Oberá, Jardín América y San Vicente. En dos de los casos, las viviendas quedaron arrasadas por completo, mientras que en el tercero una joven madre consiguió evitar que las llamas se extendieran gracias al rápido apoyo de vecinos. No se registraron personas lesionadas en ninguno de los hechos.
El primer episodio ocurrió en Oberá, minutos antes de la medianoche, cuando Bomberos y efectivos de la Seccional Tercera acudieron a una vivienda de calle Bragado tras declararse un principio de incendio. El fuego avanzó sobre el techo de chapas de cartón y una estructura de madera, pero la propietaria, Viviana Soledad B. (25), logró controlarlo con ayuda de vecinos, priorizando el resguardo de sus tres hijos menores: Perla (8), Junior (7) e Hilara (5). Una vez asegurada la casa, los Bomberos confirmaron que no había riesgo de reinicio. Las primeras averiguaciones apuntan a un origen vinculado a la intervención humana.
Más tarde, en Jardín América, alrededor de las 1.55, una vivienda de madera perteneciente a Victoriano R. (68) quedó destruida por completo en el barrio Colonia Flora de Puerto Leoni. Bomberos locales trabajaron intensamente para sofocar las llamas, que según el propietario, se habrían iniciado por un cortocircuito. Tras el operativo se solicitó la intervención de Bomberos de la Policía para realizar las pericias correspondientes.
El tercer incendio se registró en San Vicente, cerca de las 3.20, en la zona de Parada Molino. Allí, una casa de 7 por 8 metros construida en madera fue consumida totalmente por el fuego. Su propietario, Sebastián P. (82), logró salir ileso, aunque sufrió la pérdida total de sus pertenencias, incluida documentación y electrodomésticos. Bomberos Voluntarios trabajaron para contener el siniestro, cuyas causas aún son materia de investigación.








