Este año participaron del programa “Mi escuela recicla” alrededor de 300 establecimientos educativos de todos los niveles y más de 1.300 docentes.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, la coordinadora de este programa provincial en el que trabajan en forma articulada tres organismos (la Subsecretaría de Economía Circular, la Subsecretaría de Coordinación de Gabinete y la Subsecretaría de Educación), Noelia Alejandra Giménez, contó que este es el segundo año de trabajo conjunto y espera poder continuar en 2026.
“Trabajamos en Núcleos de Educación del Nivel Inicial (NENI), escuelas primarias, secundarias e institutos superiores de formación. El programa es un grano de arena en lo referente a concientización y trabajo en reciclado de residuos”, indicó.
Giménez destacó que el nivel de participación de docente en el programa aumentó de 2024 a 2025 pero destacó que “lo más importante es que los que participaron en 2024 volvieron a hacerlo en 2025 porque eso quiere decir que la propuesta les resultó significativa, pudieron incorporar y hacer efectivo el programa en las escuelas”.
“Desde Educación, nuestro objetivo es la concientización y el cuidado ambiental a través del acopio y selección de algunos tipos de residuo, entre ellos materiales plásticos, cartones y maples de huevos para que se puedan reutilizar o reciclar”.
“Casi todo, excepto vidrio”
A lo largo del año, los alumnos junto a los docentes participantes del programa acopian cartones, botellas plásticas, tapitas, latas, pilas, bandejas de telgopor. Según indicó Giménez, “evitamos el vidrio por una cuestión de seguridad”.
Contó que trabajan en forma articulada con los municipios “los que adhirieron al programa son los encargados de coordinar con los directivos las fechas en que pasarán a recolectar los residuos acopiados porque es imposible para la escuela reservarlos durante todo el año”.
Indicó que “cuando hay alianzas para lograr los objetivos, como en este caso nosotros nos aliamos con otros ministerios e intendencias para poder lograr que en las escuelas no solo se enseñe la cuestión pedagógica del cuidado ambiental sino que también materializar esta enseñanza en una acción para incidir en el indicador de cantidad de residuos que se generan anualmente”.
Destino de los materiales
En cuanto al destino de los materiales que se acopian, la funcionaria detalló que “algunos son reutilizados por los emprendedores o feriantes de los distintos municipios, como los maples de huevos; los plásticos se destinan para decoraciones en los municipios o se reducen a botellas amor; mientras que los cartones se venden a acopiadoras o algunas escuelas con modalidades técnicas o agropecuarias los reutilizan para maquetas o para packaging”.
Según indicó Giménez, el año pasado había una empresa que recolectaba cartones y plásticos en Posadas que pasaba por las escuelas y pagaba por kilo por el material, “pero este año no tuvimos esta posibilidad porque la empresa se trasladó a otra provincia”.
Consultada sobre la inscripción para el próximo año, Giménez señaló que tienen muchas ganas de continuar con el programa el próximo año, “ojalá podamos continuar y podamos seguir mejorando, sumando más escuelas y docentes”.
Para 2026
Noelia Giménez anticipó que una vez que los tres organismos que participan en el programa definan su continuidad, “seguramente estaremos informando sobre las inscripciones a partir de la primera semana de marzo”.





