La sexta audiencia de juicio oral a los seis policías acusados de torturar y matar al albañil Carlos Raúl Guirula, durante la madrugada del 19 de julio de 2014 tras su detención en un hotel alojamiento de esta capital, se destacó por el relato de una psicóloga del Poder Judicial quien realizó el informe sobre la conducta y patrones de la salud mental de la oficial de la comisaría Decimosexta involucrada, Lourdes Beatriz Tabárez.
La licenciada en psicología Noelia Biele fue puntillosa y cada respuesta la contextualizó con los métodos de análisis que utilizó para entrevistar a jefa de la patrulla policial que ordenó la detención de Guirula hace poco más de once años y que terminó con la víctima sin vida con las costillas rotas y perforándole los pulmones.
Biele describió las tres entrevistas para analizarla a la encartada: “Más allá de confeccionar un perfil psicológico, es poder informar sobre características de personalidad que sean inherentes al hecho o que tengan alguna relación o que ayuden a explicar o resolver el hecho que se investiga”. Y de este contexto precisó sobre Tabárez: “Presenta indicadores de manipulación, de imposibilidades de ponerse en el lugar del otro, dificultades con la figura de autoridad, impulsos agresivos y cosificación”.
Biele halló en la acusada rasgos de “baja tolerancia a la frustración y eso también da indicadores de una personalidad egocéntrica y narcisista, que no puede ser empática, que no puede soportar ciertas normas o leyes de lugares”.
“La cosificación consiste en el trato de uno con los demás. Si uno no puede ser empático, no puede ver al otro como persona, con sus sentimientos y emociones. Es tratar al otro como si fuera un objeto”.
“Los factores de riesgo son todos estos indicadores: el súper yo, que no puedo frenar a los impulsos, que no puedo reflexionar, indicadores de una persona fría, que manipula, que cosifica. Una persona que está en un rol como policía y presenta estos indicadores falla”, agregó.
“Un uniforme también se relaciona con las fallas en la baja autoestima, la poca tolerancia a la frustración e inseguridades. Con una personalidad de baja autoestima, el uniforme, compensa, porque te pone en situación de poder, me hace sentir más segura, con más autoridad y puede llevar a conductas de autoritarismo”.
Destacó también en la analizada una “personalidad con rasgos psicopáticos”.

“La psicopatía es una forma de ser, una estructura de personalidad. Muchas personas en la sociedad tienen esta característica, son aquellas que presentan indicadores de manipulación, cosificación, de falla en la captación del sentimiento del otro, de ponerse en el lugar del otro. Muchas personas funcionan así con esos rasgos, pero el problema es cuando esas características se suman a la falla en el control de los impulsos. Eso podría llevar a conductas desadaptativas”.
También fue consultada por el defensor oficial de Tabárez, Mario Ramírez sobre si la imputada podría reaccionar ante un golpe de la misma manera violenta. “No encontré indicadores de emoción violenta”, pero aclaró que ella no estuvo presente al momento del hecho.
Declaró ayer otro perito, licenciado en Criminalística de la Policía, Juan Carlos Maderner, quien confirmó la presencia de manchas de sangre en la caja de la patrulla de la comisaría Decimosexta y en el piso del playón donde observó ya sin vida a Guirula tras ser convocado por el juez de Instrucción 1, Marcelo Cardozo.
También se presentó un exintegrante de la Secretaría de Apoyo para las Investigaciones Complejas (SAIC), Mauro Ruiz Díaz, quien halló en la requisa a la seccional el teléfono celular de la víctima fatal en el casillero de la oficial Tabárez.









