El presidente Javier Milei vetó en su totalidad el Proyecto de Ley 27.796, sancionado por el Congreso el 22 de agosto pasado, que declaraba la emergencia sanitaria en salud pediátrica y residencias médicas nacionales, a través del Decreto 651/2025.
La medida, publicada este jueves en el Boletín Oficial, fue fundamentada en un extenso considerando que acusa al proyecto de carecer de “parámetros verificables”, tener “mandatos abiertos y ambiguos”, y generar un “impacto fiscal directo estimado en $115.030 millones”, cifra que, según el Gobierno, “desfinanciaría programas esenciales y erosionaría la coparticipación federal”.
Los motivos del veto
En el decreto, el Ejecutivo argumenta que:
- La redacción del proyecto es “indeterminada”: no define con precisión qué se entiende por “funciones críticas”, “personal de salud asistencial y no asistencial”, ni establece criterios claros para la referencia/contrarreferencia en alta complejidad.
- El costo salarial es “insostenible”: la recomposición salarial retroactiva a noviembre de 2023 —que incluye a residentes de todas las especialidades, incluso en efectores no pediátricos— implicaría un gasto de $115.030 millones, sin fuente de financiamiento genuina.
- La exención del Impuesto a las Ganancias para guardias y horas extras en efectores públicos y privados tendría “consecuencias presupuestarias inestimables” y afectaría la coparticipación federal.
- La prioridad presupuestaria absoluta para salud infantil y adolescente (art. 8) “carece de razonabilidad” y pondría en riesgo otras áreas sanitarias urgentes.
- La derogación de la Resolución 2109/25 (que regula el sistema de residencias) es “inconstitucional”, ya que el Congreso no puede revocar actos administrativos del Poder Ejecutivo.
Garrahan y residencias
Uno de los puntos más destacados del decreto es la defensa del Hospital Garrahan, señalado por el proyecto como “hospital de referencia nacional”. El Gobierno afirma que: “En poco más de un año y medio, el Garrahan logró déficit cero por primera vez en sus 38 años de historia, con ahorros de $40.000 millones y un presupuesto actual de $180.000 millones -$220.000 millones con aporte de la Ciudad-. No necesita una ley de emergencia para funcionar: necesita gestión eficiente”.
Además, se destaca que el nuevo reglamento de residencias (Resolución 2109/25) -cuya derogación pretendía el proyecto- ha tenido “alta aceptación”, con el 100% de nuevos residentes en el Garrahan optando por la modalidad “beca institución”.
No se puede gastar más de lo que ingresa
El decreto incluye una fuerte defensa del equilibrio fiscal como eje de la política económica: “La estabilidad económica es fundamental para el bienestar. La primera regla de la economía es que no se puede gastar más de lo que ingresa. Cuando se le da la espalda al equilibrio fiscal, quienes más sufren son los que menos tienen”.
El texto también recuerda que el Congreso tiene el deber constitucional de “proveer a la defensa del valor de la moneda” (Art. 75, inc. 19) y critica que el proyecto “ponga en riesgo el equilibrio alcanzado con sacrificio”.
Qué sigue
El Ejecutivo anunció que el próximo 15 de septiembre enviará al Congreso el Proyecto de Presupuesto 2026, donde -asegura- se debatirán “de manera integral” los recursos necesarios para la salud pediátrica y las residencias, “con coherencia financiera y planificación realista”.
También reiteró su compromiso con “políticas públicas fiscalmente responsables” y con “la emisión monetaria cero” como herramienta para “eliminar de raíz la inflación”.





