Las náuseas y los vómitos son los síntomas de una enfermedad o condición, por lo que la causa subyacente debe ser identificada y tratada por un profesional.
Los motivos por los que sentimos este malestar o sensación extraña en el estómago pueden ser desde migrañas, fiebre, gripes y gastritis hasta un embarazo o la menstruación. Pero también pueden ser síntoma del síndrome del colon irritable o de intolerancia a algún alimento.
Claro que también nos puede dar náuseas por el solo hecho de ir en auto, barco o algún otro medio de transporte.
Más allá de la obligatoria visita al médico para ver qué nos está pasando, si es que nos está pasando algo, existen varios remedios caseros para mitigar esas desagradables ganas de vomitar.
Estos remedios caseros son muy sencillos y seguramente muchos de ellos ya se tengan en la casa.
Uno de ellos es el jengibre, que es un remedio natural que puede ayudar a quitar las nauseas gracias a que ayuda a disminuir los jugos gástricos y a reducir los bruscos movimientos del tracto gastrointestinal.
Una infusión de manzanilla es otra opción porque tiene efectos antiácidos y analgésicos.
Las galletitas saladas son un remedio para las náuseas matutinas producidas por el embarazo, pero no conviene consumirlas en exceso porque podrían causar el efecto contrario.
Relajarse es una de las mejores opciones: poner un paño frío en la frente, respirar profundamente y tomar una siesta ayudará a que las náuseas desaparezcan, sobre todo si son producidas por problemas de ansiedad.
Recomendaciones y consejos
Es importante descansar el estómago y al mismo tiempo evitar la deshidratación. Los líquidos (preferentemente agua) deben consumirse durante las primeras 24 horas y luego la dieta debería ir ampliándose según la tolerancia.
Se deben evitar los alimentos picantes y con fuertes olores, así como bebidas con gas, cafeína o alcohol.
Evitar los alimentos grasosos, procesados y con mucha sal y sustituirlos por otros más suaves como arroz, pasta, galletitas, pan tostado, pescado al horno o pollo.
Los más recomendables son los alimentos con mucha agua, desde sopas hasta gelatina y paletas de helado.
En cualquier caso, se debe comer y beber despacio, a la vez que masticar bien los alimentos.
Es mejor distribuirse entre 5 o 6 comidas pequeñas al día que hacer tres abundantes.
Después de comer, no conviene acostarse: sentarse es lo más adecuado y recomendado. También caminar un poco ayuda, así como abrir la ventana para tomar un poco de aire fresco.
Hay que alejarse de sitios con olores fuertes, ambientes demasiado calurosos o cargados.
¿Cuándo acudir al médico a causa de las náuseas y vómitos?
Debe solicitarse asistencia médica de inmediato:
- Si los síntomas duran más de 24 horas o si el diagnóstico es incierto
- Si existe preocupación por la deshidratación
- Si el paciente tiene condiciones médicas subyacentes que lo vuelven más frágil o susceptible a la deshidratación
Fuente: mundoasistencial.com









