“El cuerpo sabe lo que está pasando” es el primer cortometraje profesional del realizador misionero Natal Cano Rojas, una obra que explora el deseo, el silencio y la fe desde el interior de una casa. La historia transcurre durante un caluroso verano en Posadas, donde un adolescente queda solo mientras su madre y su tía viajan a Itatí para pedirle a la Virgen que su hijo abandone sus “deseos pecaminosos”. Desde esta premisa, atravesada por el ritual, la religión y el despertar del deseo, se construye una narrativa íntima y cargada de simbolismo.
La filmación se realizó en mayo, durante cuatro días, en una casa del barrio Villa Sarita. Natal Cano Rojas expresó: “Para mí es un sueño poder ver materializado este proyecto y que un montón de gente esté soñando en ver lo mismo que ese guión”. El director define la propuesta como una historia “que no se ancla en un realismo puro, sino que encuentra formas de licencias poéticas en la extrañeza del relato regional, con sus leyes difusas, las mixturas de creencias populares y la percepción de la adolescencia”.
El cortometraje propone una narrativa sensorial donde el deseo y lo religioso conviven como tensión dramática. Natal reflexiona: “La religión tiene como mucho ida y vuelta también con el discurso del deseo, del cuerpo. Mucho también con lo mágico, con la certeza y la fe, digamos”. El guion se inspira en las vivencias de infancia del propio director en Puerto Esperanza.
Más allá de explorar lo íntimo y corporal, la producción audiovisual además se presenta como respuesta política y cultural en un contexto atravesado por discursos de odio: “En este momento, que también bastante difícil para la cultura LGBT, para las personas LGBT, es bastante sorprendente que un proyecto así se esté realizando”, reflexionó el director.
A su vez, remarcó que en el país“el cine está sufriendo la falta de fondos y mucho desamparo de parte del gobierno nacional, pero para mí fue como un alivio saber que la problemática que atravesaba este corto no fue un impedimento para que gane acá en la provincia”.
La producción
Antes de la filmación, el proyecto transitó un recorrido formativo y de reconocimientos: comenzó en la ENERC NEA y pasó por el Laboratorio de Escritura de Guion del IAAviM en 2021, con la tutoría de Sergio Acosta. En 2023, obtuvo el Premio al Mejor Guion de Ficción en el Festival Oberá en Cortos y fue seleccionado en el Plan Integral de Fomento 2024 del IAAviM, en la categoría “Cortometraje de 1ra y 2da Obra”.
El actor Joaquín Scholler, quien interpreta a Mariano, valoró el proceso creativo previo al rodaje como un trabajo de profunda sensibilidad compartida: “Estuvimos meses con Natal, con el director, hablando mucho por videollamadas, haciendo preguntas, analizando”. Sobre su regreso a un set tras su participación en “Selva” (2021), Scholler manifestó sentirse “feliz y muy agradecido”, especialmente por formar parte de una nueva producción misionera.

La producción se destaca también por su equipo técnico, encabezado mayoritariamente por mujeres y diversidades, una decisión deliberada del director. Camila Acosta, a cargo de la Dirección de Fotografía, expresó: “Estoy muy agradecida y contenta por esta experiencia, por tener la oportunidad de formar un equipo de fotos de mujeres y diversidades, que un poco sale del taller de DF que impulsamos con la colectiva Mutar, entonces hoy tener la posibilidad de poner en práctica todo ese aprendizaje, la verdad que es muy gratificante”.
Acosta destacó el análisis previo realizado junto al director, “pensando las propuestas de luces, las escenas, para tratar de transmitir lo máximo posible la sensibilidad que tiene esta historia”.









