En el Día Internacional de la Lucha contra el uso y tráfico de drogas, diferentes organismos se expresaron acerca de una problemática que no para de crecer en el país.
Al respecto, en comunicación con FM 89.3 Santa María de las Misiones el padre Alberto Barros, vicepresidente de Cáritas Posadas, afirmó con preocupación que “estamos peor” ya que el narcotráfico es un problema que crece y se profundiza en los barrios de Posadas, Misiones, y en todo el país.
Según él, “el relato de que se combate el narcotráfico, que está todo controlado, es una mentira” ya que esta actividad ilegal “está mucho más encriptada que antes en nuestra patria”, relató.
Barros recordó que recientemente la Iglesia expresó su preocupación sobre el “gran crecimiento del narcotráfico, con la venta y consumo de drogas a lo largo de todo nuestro país”. Esto sobre todo lo ven en los barrios pobres y periferias, “la ausencia del Estado ha ido generando la estructura de un Estado paralelo manejado por el narcotráfico”, alertó y señaló que es una realidad que se observa “en todo nuestro país.”
El párroco lamentó que “el Estado nacional se ha corrido de todos los apoyos que tenía, comedores comunitarios, centros deportivos, experiencias educativas no formales”. Todo ello generó una “tierra de nadie” y es esta ausencia la que facilitó que “el narcotráfico haya avanzado y adueñado directamente de muchas zonas del país.”
De esta manera, señaló que “muchos de nuestros chicos ya son víctimas de la adicción, son parte del negocio del narcotráfico, consumen, venden, con esta expectativa de una vida fácil.
”Barros insistió en que “la Iglesia tiene que seguir denunciando y lo va a seguir denunciando: el narcotráfico avanza, es un negocio criminal y está asesinando a muchísima gente en nuestro país, particularmente a los más jóvenes y a nuestros barrios más pobres”.
Con un trabajo en terreno en los barrios, compartió que “todo el mundo sabe perfectamente bien lo que se vende, dónde, y todo a la luz del día”. Además, indicó que “el narcotráfico es un negocio fenomenal, eso implica muchas complicidades, políticas, judiciales, en sectores de fuerzas de seguridad”.
En Posadas, el Centro de Prevención y Rehabilitación de Adicciones que funciona desde hace más de un año “realmente funciona bien”, aseguró Barros, pero aseguró que “nos encontramos con una demanda de ayuda que nos excede totalmente”.
Por eso, Barros enfatizó que “lo que más podemos hacer todos es trabajar la prevención, tratar de anticiparnos de tal modo que este chico o aquella chica no caigan en el consumo”.
Como medida consideró necesario “generarles el mejor espacio familiar posible de contención, de escucha, de acompañamiento, que es la clave en la prevención”. En este sentido, comentó que “los chicos se sienten solos, nadie los escucha, nadie los acompaña, nadie los contiene” y eso los lleva a buscar “ámbitos perjudiciales o no sanos”.








