En Misiones, la palta Hass ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, consolidándose como un cultivo con gran potencial económico. Esta variedad, caracterizada por su piel rugosa y su tamaño más pequeño en comparación con otras, responde a una demanda creciente tanto en el mercado nacional como en el internacional.
Aunque la palta criolla, de color verde intenso, sigue predominando en los mercados locales, la Hass se destaca por sus cualidades organolépticas y comerciales, lo que la convierte en una opción cada vez más atractiva para productores y consumidores.
El desarrollo de este cultivo en la provincia se ha visto impulsado por una combinación de factores favorables. Los suelos fértiles y el clima cálido y húmedo de las regiones del centro y Alto Uruguay ofrecen condiciones óptimas para el crecimiento de este producto. A esto se suma el apoyo técnico y tecnológico que ha permitido optimizar la producción.
La implementación de sistemas de fertirriego, que combinan riego y fertilización de manera eficiente, ha mejorado el rendimiento de los cultivos. Asimismo, las capacitaciones técnicas dirigidas a los productores han fortalecido el conocimiento sobre las prácticas agrícolas específicas para la Hass.
Un elemento clave en este proceso ha sido el suministro de plantines injertados de alta calidad genética proporcionados por Biofábrica Misiones, una institución que promueve el desarrollo de cultivos de alto valor en la provincia.
Estos plantines garantizan árboles más resistentes y productivos, lo que ha contribuido a posicionar a Misiones como un polo en expansión para la producción de palta Hass.
Cosecha invernal
Este producto, de cosecha invernal entre abril y septiembre en regiones como Misiones, se distingue por su piel gruesa y rugosa, que pasa de un color verde oscuro a un tono violáceo o negro al madurar.
Su pulpa, de un color amarillo pálido, tiene una textura cremosa y un sabor que recuerda a los frutos secos, lo que la hace ideal para una amplia variedad de preparaciones culinarias.
Entre las características que han contribuido a la popularidad de la Hass se encuentra su prolongado período de cosecha. A diferencia de otras variedades, esta palta puede permanecer en el árbol durante varios meses después de madurar sin deteriorarse, lo que permite a los productores extender el tiempo de recolección y adaptarse a las demandas del mercado.
Además, su resistencia poscosecha es notable, ya que soporta bien los procesos de transporte y distribución, manteniendo su calidad hasta llegar al consumidor. El fruto, de tamaño pequeño a mediano, pesa en promedio unos 300 gramos, y su semilla es proporcionalmente compacta, lo que maximiza la cantidad de pulpa aprovechable.
Ventajas nutricionales
Desde el punto de vista nutricional, la palta Hass es rica en nutrientes esenciales. Contiene un 70% de agua y hasta un 12% de aceites saludables, principalmente monoinsaturados, que son beneficiosos para la salud cardiovascular. Estos aceites ayudan a reducir los niveles de colesterol LDL (conocido como “colesterol malo”) y a proteger el sistema circulatorio.
Además, es una fuente importante de vitaminas B y E, que contribuyen al bienestar general del organismo.
Su composición nutricional, junto con su versatilidad en la cocina, han incrementado su consumo en todo el mundo, desde ensaladas y guacamoles hasta platos más elaborados.
Cuidados en el cultivo
El cultivo de la palta Hass requiere cuidados específicos para garantizar su desarrollo óptimo. La floración de esta variedad ocurre una vez al año, durante la primavera, y el proceso de maduración puede extenderse hasta once meses, dependiendo de las condiciones climáticas y la acumulación térmica.
Los productores deben prestar atención al manejo del riego, ya que la palta es sensible tanto al exceso como a la falta de agua. Los sistemas de fertirriego, ampliamente utilizados en Misiones, permiten un suministro controlado de agua y nutrientes, lo que mejora la salud de los árboles y la calidad de los frutos.
Además, es fundamental realizar podas regulares para favorecer la entrada de luz y aire, lo que reduce el riesgo de enfermedades fúngicas en un clima húmedo como el de la tierra colorada.
Otro aspecto importante es la selección de suelos adecuados. La palta Hass prospera en suelos bien drenados, con buena capacidad de retención de humedad pero sin encharcamientos. En Misiones, los suelos rojos y arcillosos, típicos de la región, son ideales siempre que se manejen correctamente.
El control de plagas y enfermedades también es crucial, ya que la palta puede ser afectada por insectos como la arañuela roja o patógenos como la antracnosis. Para ello, se recomienda el monitoreo constante y el uso de prácticas integradas que minimicen el impacto ambiental, como el empleo de productos biológicos y la rotación de cultivos.
Mejoramiento genético
La propagación de la palta Hass se realiza principalmente mediante injertos, una técnica que asegura la uniformidad genética y la calidad del fruto. Los plantines injertados, como los que provee Biofábrica Misiones, son esenciales para establecer plantaciones comerciales exitosas.
Estos plantines se desarrollan en viveros especializados, donde se controlan las condiciones de crecimiento para obtener árboles robustos y resistentes.
Una vez en el campo, los productores deben garantizar un espaciamiento adecuado entre los árboles, generalmente de 5 a 7 metros, para permitir un crecimiento saludable y facilitar las labores de manejo.
El mercado de la palta Hass continúa expandiéndose, impulsado por la creciente demanda de alimentos saludables y sostenibles. En Misiones, este cultivo representa una oportunidad para diversificar la producción agrícola y generar ingresos para los productores locales.
La combinación de condiciones naturales favorables, avances tecnológicos y apoyo institucional ha sentado las bases para que la provincia se consolide como un referente en la producción de este aguacate.
A medida que más productores adoptan esta variedad, se espera que la palta Hass siga ganando terreno en los mercados, tanto dentro como fuera del país.






