A semanas del inicio de la zafra, la producción tealera se vio afectada por un ataque de ácaros sin precedentes que amenazaba con generar enormes pérdidas en las plantaciones. No obstante, ese obstáculo fue superado y la primera cosecha, de las cuatro de la temporada, comenzó con normalidad.
No fue hasta el inicio de la segunda cosecha, cuando los ácaros volvieron a atacar a las plantaciones de diferentes productores, sumados al ya tradicional “rulo” y también un pequeño escarabajo que perfora las hojas de las plantas. Esta nueva ola de plagas se da en el marco de una temporada de bajas lluvias, que propician el clima seco idóneo para la propagación de los insectos.
El productor y referente de la zona centro de la provincia, Cristian Klingbeil, describió cómo la plaga del “cascarudito” ha afectado gravemente los cultivos en la zona del productor de Gobernador Roca, Arnaldo Schmidt. “Es algo que está avanzando y no tenemos mucha información de cómo combatirla. Se trabajó con el INTA, pero los resultados son insuficientes”, señaló en diálogo con PRIMERA EDICIÓN.
El “cascarudito” daña los brotes de las plantas de té, provocando una caída abrupta en los rendimientos. “En lotes donde solíamos sacar entre cinco y seis mil kilos por cosecha, ahora apenas llegamos a dos mil kilos”, lamentó y agregó que este insecto ha mostrado una capacidad “alarmante” para propagarse rápidamente.
Al respecto, Schmidt, también reportó pérdidas significativas debido al “cascarudito”. “En un lote de tres hectáreas perdí 15 mil kilos, y en otro de nueve hectáreas, 25 mil kilos. La producción cayó un 60% en promedio, y sé de casos donde la merma llegó al 80%”, detalló a este Diario.
El resurgimiento del ácaro
El ácaro, otra plaga que ha ganado terreno en los últimos años, empezó a resurgir con fuerza en diferentes chacras misioneras. Klingbeil describió cómo esta plaga ha avanzado velozmente en los cultivos de té.
“Es impresionante la velocidad con la que viene coloreando el teal. Si la planta tenía brote, este queda más liviano, afectando la calidad final del té en el secadero”, explicó.
Según Schmidt, el ácaro suele aparecer antes de la primera cosecha, cuando el té comienza a prepararse tras la poda. “Con la falta de lluvias, el ataque del ácaro ha sido terrible. Aunque fumigamos con los venenos permitidos, estos son débiles y no duran mucho tiempo”, comentó.
Los costos de control
El control de estas plagas es un desafío para los productores debido a los altos costos de los insumos y las restricciones sobre el uso de ciertos agroquímicos. Klingbeil indicó que el costo de pulverización supera los 60 mil pesos por hectárea, un gasto que no resulta viable para muchos.
“Encima, no sabemos si podemos usar productos realmente eficientes debido a las prohibiciones en la provincia. Aunque hubo alguna modificación reciente, tampoco conviene por el alto costo de esos productos”, agregó.
Schmidt coincidió en que los productos permitidos son poco efectivos y limitan las opciones para combatir las plagas. “No podemos usar otros venenos porque después hay problemas para comercializar el té seco. Las industrias imponen sus restricciones, así que tenemos que conformarnos con lo que está permitido, aunque no funcione bien”, explicó.
El impacto de la sequía
La sequía es otro factor determinante que agrava la situación. Klingbeil describió cómo la falta de lluvias está afectando la capacidad de las plantas para rebrotar después de los ataques de las plagas. “Hoy dependemos prácticamente de la lluvia. Si no llueve, los rendimientos seguirán cayendo. No justifica pulverizar en estas condiciones”, afirmó.
La situación no es diferente en la zona de Schmidt. “La falta de agua está complicando muchísimo el rinde de la cosecha. Cuando hace calor y no hay humedad, el té no brota. Esto afecta tanto la cantidad como la calidad de la producción”, explicó.
Reducción de cosechas
El impacto combinado de las plagas y la sequía ha llevado a una reducción en el número de cosechas que los productores pueden realizar durante la temporada. Klingbeil mencionó que el ácaro puede provocar la pérdida de una cosecha completa, lo que representa un 25% menos de producción anual.
Schmidt detalló que, en condiciones normales, los productores realizan hasta cuatro cosechas por zafra, desde octubre hasta mayo. Sin embargo, este año, muchos apenas alcanzarán tres cosechas debido a las condiciones adversas. “El tiempo entre cosechas depende del clima. Con mucha humedad y calor, el intervalo es de menos de 50 días, pero ahora estamos viendo intervalos de hasta 60 días o más”, indicó.
Plagas en expansión
Las plagas también están extendiéndose rápidamente a otras zonas de la provincia. Klingbeil señaló que el ácaro, que inicialmente afectó a las zonas de Alem, Guaraní y Oberá, ya está avanzando hacia San Vicente, donde las lluvias han sido algo más generosas.
“Normalmente, el ataque del ácaro comienza en ciertas zonas y en pocas semanas ya está afectando a todos los teales de la provincia. Este año, la situación es peor porque no se viene fertilizando como antes. Las plantas están débiles, anémicas, y sin fertilización ni lluvias, los teales están más vulnerables”, explicó.
Schmidt coincidió en que la expansión de las plagas es preocupante y está relacionada con la falta de inversión en fertilización. “Este año, prácticamente no se puso fertilizante porque cuesta entre 170 y 180 mil pesos por hectárea. Y para que funcione, tiene que llover, algo que no está ocurriendo”, añadió.
Perspectivas para el sector
A pesar de las dificultades, los productores intentan adaptarse a las circunstancias. Sin embargo, la situación sigue siendo incierta. Klingbeil advirtió que, sin lluvias significativas en los próximos meses, los rendimientos caerán aún más.
“Todo depende de la lluvia. Si no mejora, no solo perderemos más cosechas, sino que el panorama para el próximo año será aún peor”, concluyó.
Schmidt, por su parte, expresó su preocupación por el futuro de la actividad. “Cada año enfrentamos más desafíos. Si no encontramos soluciones para las plagas y no se estabiliza el clima, muchos productores no podrán seguir adelante”, afirmó.





