POSADAS. Cuando en enero se concretó la visita de la producción de Mariano Peluffo para filmar fragmentos de la historia del cementerio La Piedad, surgió la idea de organizar visitas nocturnas guiadas a ese camposanto. Ahora ya parece que -tras años de barajar la propuesta, pero sin que nadie se haya animado a materializarla- a partir de noviembre, como una manera de revivir las historias de personajes importantes para la ciudad que fueron enterrados allí, se hará una prueba piloto para estudiar el lugar y dependiendo de los resultados, las visitas para turistas tendrán lugar una vez al mes. La iniciativa volvió a cobrar fuerza a través de los fundadores del movimiento Posadas del Ayer, quienes conversaron sobre el proyecto con el director de Turismo municipal, Oscar de Giusti, para iniciar en Posadas, una práctica turística y cultural que se realiza en cualquier gran ciudad del mundo. “La idea es juntar un grupo de valientes, ya que las visitas se harán de noche, para darle un marco de misterio”, refirió Leo Duarte, principal impulsor de la iniciativa, quien agregó que “la propuesta no va a poder estar abierta para todas las edades, por ejemplo, no se admitirán menores o ancianos, ya que la iluminación no es la adecuada y la necrópolis tiene escaleras y desniveles que pueden llegar a jugar una mala pasada a los visitantes”, sostuvo.Por ejemplo, como quien va camino a la Cruz Mayor (que se encuentra cercana a los portales de la entrada), fueron construidas las tumbas de todos los “famosos” locales, pero también es un espacio con muchos desniveles y se dificulta el recorrido, mucho más cuando se lo realiza de noche. En la prueba se analizarán las condiciones del espacio y la iluminación.De acuerdo a lo que se está estudiando hacer, para ver como implementar la actividad, la primera quincena del mes entrante se hará una prueba piloto después del Día de los Difuntos.“Depende de cómo salga el recorrido ese día, se planea que lo ideal será implementarlo una vez al mes, como se hace en el cementerio de la Recoleta”, sostuvo Duarte. Historias enterradas“Más que nada se pretende dar a conocer las historias de los personajes enterrados en La piedad y que muy poca gente conoce. Hace mucho tiempo se habló de la idea, pero hasta ahora nadie se animó”, explicó el impulsor de Posadas del Ayer.Pero además del listado de personajes en la piedad, sobre los cuales se basarán los paseos nocturnos, en la cual se pueden nombrar como por ejemplo a César Napoleón Ayrault (ex gobernador): Tito Cuchiaroni (primer misionero en jugar en la selección argentino de Fútbol), Manuel Antonio Ramírez, Claudio Báez (músico no vidente); Clotilde Gonzales Ramos (fundadora de varias escuelas en posadas), Raimundo Fernández (esposo de Clotilde y primer corresponsal del diario la nación en Misiones), Héctor Barreyro (ex gobernador de misiones) Juan Manuel Irrazabal (ex gobernador), Juan Barthe (hermano de Domingo Barthe) y Pepe Novoa (músico); en el lugar también se atesoran obras de arte que forman parte del patrimonio arquitectónico de la ciudad.Un dato de interés: los primeros pobladores de la ciudad de Posadas se encuentran enterrados sobre el paredón del cementerio que da hacia Almirante Brown y Santa Catalina.“Aparecidos”Hace algunos meses en un artículo de este diario se había compartido con los lectores el relato somero de algunos cuidadores del camposanto quienes, en el cumplimiento de sus tareas, vivieron experiencias sobrenaturales, como escuchar el sonido de un caballo y de un jinete que se acercan a toda velocidad…De ahí que, el recorrido (como no podría ser de otra manera), además de contar con la coordinación de historiadores y arquitectos para nutrir de riqueza y conocimiento al relato, tendrá como condimento la narración algunas de las historias de fantasmas que supieron poner la piel de gallina a quienes las oyeron por primera vez, como la de la cadenita de oro, protagonizada por un taxista quien había recibido la joya de manos de una hermosa muchacha que lo citó frente a la entrada del cementerio, quien le paga para entregar la cadena en determinada dirección de la ciudad. Cuando el hombre cumple con el encargo, grande es su sorpresa al oír de la mujer que lo recibe, blanca de impacto: “Es de mi hija que murió hace veinte años”.





Discussion about this post