POSADAS. El fuerte temporal que se desató a mediados de semana dejando sin energía eléctrica a miles de misioneros, reveló las precarias condiciones en las que se desempeñan algunos trabajadores de la deficitaria Electricidad de Misiones SA (Emsa), así como el mal estado de algunas redes que parecen no tener el mantenimiento adecuado especialmente en el interior.Víctor Rojas, delegado gremial de Luz y Fuerza en Apóstoles (con 23 años de antigüedad en la empresa y seis como delegado); fue consultado si la empresa estatal provincial está preparada para actuar en circunstancias como las vividas, fue contundente: “No, no. Nosotros desde hace más de tres años venimos de reuniones de autocovoctarias de delgados reclamando, no a la empresa porque Emsa es una calcomanía del gobierno de turno; los elementos de seguridad, camionetas, camiones y materiales. Imagínese un empleado reclamando al patrón que le entregue materiales para trabajar”, dijo el trabajador eléctrico a Radio News.Deudas y decadenciaSobre su zona de influencia, dijo que con los temporales “la peor parte de la llevan San José, Azara y Concepción de la Sierra, ero también pasa en otros lugares de la provincia. La situación de la empresa es decadente. El estado financiero es terrible. La deuda con los empleados es millonaria. Y lo triste de la historia es que quien termina pagando todo es el usuario que paga. Porque están aquellos que tienen siete u ocho facturas impagas que porque son políticos no se les cobra. Pero al que paga al día nosotros les debemos fidelidad y no nos da la garganta para explicarles lo que está pasando”.“Hoy la situación de Emsa es calamitosa. Los muchachos, gracias a su buena voluntad, salen a remendar. Se ponen la camiseta. Pero en esta situación donde no hay combustibles, ropa, herramientas, camionetas no hay nada, en ese estado estamos nosotros. Si los ves a los muchachos trabajando, los ves con harapos cuando las ART exigen ropas ignífugas. Y damos lástima porque a las camionetas se les salen las ruedas, está todo atado con alambre”, denunció Rojas.Según el dirigente, “esto no puede pasar en una empresa que recauda plata en pala. Ayer (por el jueves) el presidente de Emsa salió a dar las gracias. Claro, está con miedo de que no saliéramos a trabajar por la gran deuda que tienen con nosotros. Pero nos debemos a la gente porque con la tarifa que pagan cobramos nuestros sueldos”.Reveló Víctor Rojas de LyF Apóstoles, que “el 90% de los postes de Apóstoles están podridos en el tallo. Y hasta ahora sólo encontramos trabas, trabas y política y política. Todavía tenemos suerte porque acá cortás la luz 17 a 20 horas y todavía no te dicen nada ni salen a protesta. Andá a hacerlo en Buenos Aires te dan vuelta el Obelisco”.“Tenemos que dar más atención a Iguazú porque allá esta el hotel del gobernador” Ampliando los reclamos internos que realizan los delegados gremiales sobre el precario sistema de trabajo explicado, Víctor Rojas contó que tienen como orden “dar más atención a Iguazú porque allá está el hotel del gobernador; y el resto que se cague. Entonces, llegamos a un punto que nos cansamos de quejarnos. Y a lo último molestamos (…) El problema de Iguazú es la transmisión no la potencia. En los 90 se compró una estación nueva y sabíamos que en algún momento se la tendrían que meter de donde la trajeron”. Rojas recordó que “Emsa es 90% acciones del Estado, es el Estado el que debe prestar el servicio a la comunidad, pero el Estado está ausente”.Según Rojas, “de los 17 puntos que reclamamos en Trabajo era el pedido de elementos de seguridad, herramientas de trabajo y camionetas. Pero los delegados nos quedamos con la palabra en la boca sin saber si el sindicato hizo o no el reclamo…”.Respecto al último incremento de tarifas que se aplicó en las facturas de energía con el fundamento de que el mismo iba a incremento de salarios de los trabajadores, Rojas denunció que “hace seis años que no discutimos salarios ni paritarias. Ese supuesto aumento con la suba de tarifas, nunca lo vimos”. Temor a represaliasRojas admitió que habrá represalias en su contra: “alguien tiene que hacerlo, la gente tiene que saber que Emsa no es de Closs ni de Rovira ni de Puerta. Es nuestro. Es del Estado. Y tenemos que defender lo que es nuestro”. Y dijo tener “miedo, porque esta gente es muy vengativa. Cualquiera va a tener miedo. Pero ¿por qué me voy a callar? Es como hablar de Garabí. No hay una comisión en la empresa o el sindicato. Nadie nos puede explicar cuáles son las necesidades de construir la represa”. Al respecto concluyó que “"Misiones tiene un grave problema de distribución de energía eléctrica. No hay inversión”.





Discussion about this post