BERNARDO DE IRIGOYEN. El 20 de agosto el periodista y editor responsable del periódico local “El Pepirí”, Silvio Novelino, sufrió un atentado. Aproximadamente a las 3 arrojaron una bomba molotov contra su vehículo, que se encontraba estacionado dentro de su propiedad. Gracias a los rápidos reflejos el incendio fue sofocado y no hubo que lamentar víctimas, aunque sí daños materiales.El caso tomó rápida difusión y se logró la inmediata intervención de las máximas autoridades policiales y políticas “garantizando” una pronta y efectiva investigación.Ha transcurrido casi un mes desde el atentado y si bien en sede policial han declarado casi una veintena de personas, no hay ningún detenido y ni siquiera hubo por parte del juez que entiende la causa un llamado a indagatorias. PRIMERA EDICIÓN dialogó con Novelino, quien expresó cierta preocupación por la lentitud con que avanza el proceso: “Estamos todavía esperando que el juez nos convoque, hasta el momento nos hemos manejado con la comisaría local inclusive ampliando las veces que fue necesario nuestra declaración pero sabemos que aún no se ha llamado a indagatoria a los posibles sospechosos”.“Si bien en nuestro domicilio nos sentimos seguros, pues tenemos custodia policial permanente, la cual fue puesta inmediatamente después del atentado, no me puedo sentir tranquilo yo y tampoco mi familia, pues por una simple cuestión laboral y de vida cotidiana andamos mucho por el pueblo, transitamos por la vía pública y sabemos que los responsables del atentado están sueltos y nos pueden volver a atacar en cualquier momento”, declaró con preocupación.Para el periodista “no hay dudas de que el atentado sufrido se debe a algunas de las investigaciones publicadas en el periódico, de manera que siguiendo esa línea no es muy difícil deducir quienes serían los sospechosos de ser por lo menos autores intelectuales”, dijo.“Si bien en un primer momento hemos sentido mucho miedo y nos llegamos a plantear la continuidad de nuestro trabajo, pasados esos primeros instantes y sintiendo el respaldo de los colegas y de la comunidad decidimos continuar. Hemos tomado muchos recaudos a nivel familiar y laboral pero no vamos a ceder en la rigurosidad y el profesionalismo”, concluyó.
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